El negocio (multimillonario) de las Kardashian

Son conocidas a nivel mundial, están siempre en las noticias y son un ejemplo para los millones de fans que les siguen en sus redes sociales. Odiadas por unos y amadas por otros, las Kardashian no dejan indiferente a nadie. Y no es para menos, porque son una familia que ha conseguido hacer de su mera existencia un negocio multimillonario.

Y detrás de este gran imperio está Kris Jenner, la ‘momanager’ de la familia (neologismo surgido de sumar madre y manager que, por cierto, ya ha intentado patentar sin éxito). Poco queda de la que un día fue azafata de American Airlines y dependienta de ropa en una tienda de bebés. En la actualidad, Kris es considerada una de las ejecutivas más poderosas del show business y está al frente de su empresa, Jenner Communications.

La propia Kris fue la primera en aparecer en la pequeña pantalla en los anuncios de teletienda (sección gimnasia) de su ex marido Bruce Jenner (hoy Caitlyn Jenner) a comienzos de los 90. Pero seguramente ni ella misma podía imaginar el fenómeno en el que se iba a convertir su familia cuando, en 2007, se creó el reality ‘Keeping Up with the Kardashians‘. Ocho años más tarde, concretamente en 2015, Kris firmaba un contrato por 100 millones de dólares con el canal E! por la renovación de cuatro temporadas del programa.

La televisión las ha catapultado a la fama y en 2005 la primogénita de la familia, Kourtyney, se iniciaba en el mundillo participando en el reality ‘Filthy rich: Cattle drive’. Dos años antes le tocaba a Kim, en ‘The simple life’, donde ejercía de amiguísima de Paris Hilton. Más reciente es la creación de ‘Kourtney & Khloé take the Hamptons‘, fruto de sus andanzas en la alta sociedad de esta zona estadounidense como antes hicieron en Miami. Además, se acaba de estrenar ‘Cocktails with Klhoé‘, donde ella entrevista a varios famosos y donde nunca falta la aparición estelar de alguna de sus hermanas.

Pero los negocios de las Kardashian van más allá de la televisión. Bajo la Ka de Kardashian se venden más de una docena de perfumes, una completa gama de maquillaje, cremas bronceadoras y libros. En 2010 recibieron unos 65 millones de dólares sólo en concepto de concesión de licencias con su nombre y parte de sus ingresos también proceden de la cadena de boutiques DASH. A todo ello hay que añadir sus apariciones en público -inauguraciones de clubes, apertura de tiendas, fiestas, eventos- con las que facturan más de lo que ganan trabajando en televisión.

Cada miembro de la familia es importante, especialmente a nivel comercial, ya que la diferencia de edad entre las hermanas permite abarcar a un público muy extenso. Por ello, las últimas en sumarse al negocio familiar han sido las pequeñas Jenner. Kylie acaba de sacar al mercado su propia línea de cosméticos con pintalabios, extensiones de cabello y próximamente laca de uñas. Además, siguiendo con el ejemplo de sus hermanastras, han creado su propio juego para móvil y su marca de ropa y zapatos. Incluso Rob, el único chico de la familia, ha participado en varias campañas como modelo, creó una linea de calcetines y participó en ‘Dancing with the stars’.

Queda claro que más allá del superfluo y polémico mundo que envuelve al clan Kardashian, la familia más famosa de la telerrealidad es, en realidad, una auténtica fábrica de hacer dinero.