Tómate un respiro otoñal

Cada año se repite la misma historia. En verano apagas el ordenador de tu trabajo, preparas tu maleta llena de bañadores y ropa colorida, coges el coche o el avión y finalmente llegas a tu hotel dando comienzo a tus merecidas vacaciones. El turismo de sol y playa continúa siendo el más elegido, considerando las zonas litorales el lugar más adecuado para disfrutar de sus vacaciones y desconectar de la rutina diaria tras un duro año de trabajo.

Y cuando regresas, la vuelta al trabajo suele ser traumática. Por eso, muchos expertos recomiendan escapadas de fin de semana durante los meses del otoño a lugares más cálidos y con mar… si es posible. Simplemente por el placer de cambiar la rutina y romper con los hábitos, pero también para recordar a tu cuerpo los beneficios del mar, de caminar por la playa y de relajarse con el sonido de las olas. Si te puedes escapar tres días, ten en cuenta estos consejos para disfrutar al máximo por dentro y por fuera.

Pasear por la orilla del mar, mejora la circulación y es un exfoliante natural. Una actividad tan sencilla como esta ayuda a nuestra salud aunque no seamos conscientes de ello, mejorando la circulación sanguínea y eliminando las impurezas de nuestros pies. Además, caminar entre 45 minutos y una hora al día favorece el control del peso. Es muy recomendable para quemar la grasa de los típicos excesos del verano y permite ponerse en forma.

Aumenta la energía. Después de un año en el que el estrés no ha desparecido de nuestras vidas, pasar unos días en la playa durmiendo más horas, hará que la ansiedad se convierta en algo del pasado gracias al poder revitalizador que tiene el sol. Volveremos con energía al trabajo y con capacidad para afrontar nuevos retos con garantías de éxito. Aunque hay que protegerse obligatoriamente de sus rayos con crema solar, nos ayuda a conciliar el sueño con facilidad, mejora nuestro estado de ánimo y mantiene fuertes los huesos ya que aporta vitamina D.

Mejora la respiración. El alto nivel de humedad que tienen las ciudades o pueblos con playa beneficia a los que sufren problemas respiratorios al actuar como si fuera una terapia natural. Además, la brisa marina permite que se respire aire puro, lo que favorece la descongestión que sufren las personas que viven en ciudades con altos niveles de contaminación, porque el aire contiene pequeñas gotas de agua que hacen desaparecer las toxinas.

Relajarse. Si tenemos una salud fuerte, este es posiblemente el principal motivo por el que elegimos el turismo de sol y playa para disfrutar de las vacaciones. Durante unos días nos quitaremos el reloj de la muñeca y solo nos preocupamos por el color de la bandera del mar para saber si podemos darnos un baño o no. El estrés provoca que busquemos destinos para relajarnos y el sonido de las olas contra las rocas ayuda en esta tarea para incrementar nuestro bienestar.

La principal conclusión es que debes apostar por un estilo de vida saludable en el que mantengas una dieta equilibrada y realices ejercicio para mantenerte en forma. Y si puede ser con escapadas otoñales a la playa, ¡mucho mejor!