Las pajaritas, para volar

La imagen que muchos tienen de la sastrería es una imagen rancia, de tiempos pasados, de trajes oscuros, de señores mayores y de presupuestos imposibles para el común de los mortales. Una visión poco atractiva que dificulta el acercamiento de la gente a esta bella profesión y que, sobre todo, imposibilita que se descubra este maravilloso mundo.

Y es aquí donde entran nuestros protagonistas de hoy, una sastrería que representa una visión renovada de la sastrería española. Un proyecto que aporta luz a la profesión, llamando a cada cosa por su nombre y que acerca a todos los públicos el arte de vestir a medida.

Detrás de esta sastrería están Cat y Paul, un matrimonio joven, apasionados de la sastrería, que un día decidieron abandonar sus respectivos trabajos y fundar Sastrería El 91. Apoyados por un equipo de experimentados sastres y patronistas han sabido actualizar la sastrería adaptándola a las últimas tendencias sin renunciar a su parte más artesanal. Un proyecto que nació hace tan solo tres años pero que sigue la huella de tres generaciones de sastres de la familia de Cat y del conocimiento textil de Paul, cuyo padre fue un gran impulsor de la cría de ovejas de lana merina en España.

Sus pilares son la geometría, la simplicidad y el movimiento. Conceptos algo abstractos que cobran vida en sus chaquetas, camisas y trajes los cuales podemos ver en la selección de los tejidos, en la armonía de sus hechuras y en los refinados detalles de sus pajaritas, corbatas y jerséis. Pero tampoco nos hagamos una idea equivocada, no solo crean prendas de última tendencia, su filosofía está al servicio del cliente adaptando sus prendas al estilo personal de cada uno.

Pajaritas de plumas de aves, cuellos con diseños únicos, chaquetas con bolsillos adaptados para el iPad y un sinfín de creaciones que han atraído a lo más granado de la cultura, el arte y la música de Madrid, a su pequeño pero coqueto espacio de la calle Rodríguez San Pedro, 14. Un espacio que sin duda alguna refleja el carácter y creatividad de esta pareja que junto con su ilusión, cariño y sinceridad han conseguido fidelizar y deslumbrar al público español e internacional.

Y decimos internacional porque desde hace varios años acuden regularmente a la feria de moda masculina más importante del mundo, la feria Pitti Uomo de Florencia, donde su innegable estilo es fotografiado por revistas tan prestigiosas como Vogue, GQ y NY Times. Desde el invierno pasado han apostado por esta plataforma para presentar sus creaciones siendo toda una revelación tanto para profesionales del sector como para el público en general.

Defienden a capa y espada el concepto de Slow Fashion, reflejo de sus inquietudes, pues la elegancia es ser uno mismo sin disfrazarse y donde debe primar la calidad de la manufactura, los tejidos y los patrones que en conjunto crean una vestimenta atemporal. Un viaje hacia lo auténtico, hacia la esencia del oficio, donde el ingenio, los gestos, las maneras, colores y sabores atraen al visitante guiándolo noblemente en el transcurrir de su parada.

El 91 inunda el mundo de la sastrería con una nuevo aire, que nos atrae poderosamente hacia el mundo del vestir a medida donde el limite esta donde tu creatividad termina. ¿A qué esperáis para descubrirlo?