Por la enigmática Maragatería
Lo trajes y bailes maragatos son los más ricos y antiguos de España.
Hasta no hace aún mucho tiempo La Maragatería –comarca leonesa cuya capital es Astorga– era lugar de pueblos olvidados que vivían del recuerdo de lo que habían sido. Castrillo de los Polvazares, Santiagomillas, Santa Colomba de Somoza, Val de San Lorenzo… eran de los más bellos pero estaban medio vacíos y por sus empedradas calles se oía solo de tarde en tarde el traqueteo de los carros. Las ricas familias, a las que pertenecían las viejas casonas, habían ido emigrando y los portalones de madera de castaño permanecían cerrados.
Ese olvido los acabó convirtiendo en una reliquia de la arquitectura maragata. Fueron sus propios habitantes los que cuidaron de que siguiera siendo así. Hoy es difícil conseguir casa en ellos y han acabado convirtiéndose en lugar de segunda residencia. Pero algunos pueblos de la Maragatería no solo ha conservado sus casonas sino tambien sus fiestas, y tradiciones como el espectacular baile maragato. El Val de San Lorenzo celebra en torno al 8 de septiembre la Virgen de la Carballeda, llamada así porque fue «milagrosamente» encontrada por un pastor hace muchos siglos escondida en un castaño.
En su honor se celebran antiguos rituales y danzas. Su origen está en antiguas fiestas paganas en las cuales se hacia ofrenda al espíritu de la vegetación de frutos del campo, en claro rito de fertilidad. La Iglesia acabo cristianizándolo y las diosas paganas sustituidas por la Virgen. En el día de la fiesta, las jóvenes visten los ricos trajes maragatos con ricas joyas (entre las que destacan las «relicas» llenas de relicarios) y los mozos portan los «Mayos» (Ramos). Son estos una mezcla de flores, frutos, ramas y velas, artísticamente colocado todo sobre un armazón, y que acompañarán a la imagen durante todo su recorrido por los campos (se ofrecen como agradecimiento por favores recibidos o en petición de otros).
Preside todo el pendón de la localidad de 12 metros de altura y muy difícil de llevar. Luego tendrá lugar la romería y los típicos juegos como el casi olvidado de la «rana» o los «bolos leoneses». Algunas cosas si han cambiado. Este año, por primera vez, el mayordomo -el encargado de organizar y correr con los gastos de la fiesta y llevar el cetro- ha sido una mujer que además abrió el baile.
Por último, al caer la tarde, y al son de la flauta y el tamboril se bailaron las famosas danzas maragatas con las «zapatetas» de origen astur (el único sitio donde se conservan). También hubo vaquillas y bolos maragatos.