El sueño americano se llama “NBA All Star”

El sueño americano no es un invento de Hollywood. El sueño americano existe porque es básicamente la recompensa del esfuerzo. Llegar alto, muy alto, pero también siendo consciente de que el suelo está cerca: “Nunca pierdas tus referencias”, dijo un día Kobe Bryant. El pasado fin de semana tuvimos decenas, cientos, miles de ejemplos al respecto y el escenario que nos lo mostró fue el ‘NBA All Star Weekend‘ de Toronto. Uno de los eventos deportivos más importantes de Estados Unidos y del mundo entero.

Una celebración en la que el baloncesto cumplía 125 años y el equipo de la ciudad anfitriona, 21. Y comenzamos dando cifras, porque fueron las protagonistas. Los números que se registraron durante tres días superaron todas las expectativas. No solo en cuanto a los récords en puntuaciones, también en términos de negocio. Días después lo seguimos evidenciando con el anuncio de extensión de diferentes ‘Partnership’. Por ejemplo, el último ha sido con la cadena de televisión ‘Sportsmax’ quien continuará y ampliará su cobertura de la NBA para todos los aficionados del Caribe.

Retransmisión de partidos con una cobertura mayor y que llegará hasta 30 países de toda la zona: “Hemos escuchado a todos los seguidores del basket. Querían más contenido”, dice Olly McIntosh, presidente y CEO de SportMax. Así, se cumplen los deseos de ambas partes, unos quieren contenido y otros mayor cobertura.

Después, por supuesto están todos los sponsor que un juego como el ‘All Star’ puede tener detrás: Kia, Verizon, Samsung, Nike, State Farm, Taco Bell, Foot Locker, Mountain Dew o Kumho Tyre, todos con una fuerte presencia a lo largo y ancho de Toronto. Una ciudad en la que el juego ha tenido un impacto de 100 millones de dólares según el estudio “Top Sports Brands in Canada”, elaborado por ‘Insightrix’, que además sitúa a la franquicia de los ‘Toronto Raptors’ como quinta marca deportiva mejor posicionada entre los canadienses.

Era la primera ocasión que el «NBA All Star Game” salía de los Estados Unidos y las audiencias hablaron por si solas, aumentando hasta los 7’6 millones de espectadores con un pico máximo de 8’7 millones. Si hablamos de audiencias, no podemos dejar a un lado a plataformas como Twitter y Facebook, donde los canales de la NBA registraron 162 millones de menciones,  entre el concurso de mates el sábado y el “partido de las estrellas” el domingo.

De vértigo fue el concurso de mates entre LaVine y Gordon. Éste último alcanzó 2,30 en su salto vertical y días más tarde las cadenas deportivas estadounidenses siguen analizando las actuaciones de estos chicos de 20 años de edad. Paradojas de la vida, ambos hicieron historia el día que Kobe Bryant ponía un punto y final en la suya: “Kobe Bryant nos bendijo con 20 años increíbles”, dijo Magic Johnson ante un abarrotado ‘Air Canada Centre’. Casi 20 mil personas emocionadas, dispuestas a cogerse de la mano y disfrutar de ese día para el recuerdo en una ciudad que registraba temperaturas de 28 grados bajo cero.

“Sí, hace un poco de frío aquí, pero he estado leyendo sobre James Naismith (…) y lo que he leído, es que si fundó este juego hace 125 años es porque pensó que había que tener una actividad que mantuviese a los jóvenes activos en estos inviernos de tan bajas temperaturas. Por supuesto tenía que pensar en un deporte que se pudiese jugar en un lugar cerrado. Por lo que, cuando escucho a la gente que está haciendo mucho frío, pienso, ‘es cierto, pero recordad que nuestros juegos son en interior, no hay problema amigos. Disfrutemos”, dijo Adam Silver, comisario de la NBA en una abarrotada sala de prensa.

Y eso hicimos, disfrutar y trabajar con una recompensa que poca gente pudo tener. Poder compartir un fin de semana con los astros del baloncesto, especialmente con nuestro compatriota, Pau Gasol. Además, fuimos testigos de la ternura de LeBron James cuando un niño le pide su firma en un balón y evidenciamos que Kobe Bryant es una gran estrella de baloncesto, sí, pero sobre todo es padre y por ello, jugó el ‘All Star Game’ muy pendiente de sus hijas, que le observaban desde primera fila.

En la gran fiesta de la NBA, fuimos parte de un sueño, de ese “american dream” del que todo el mundo habla y comprobamos que efectivamente, el baloncesto es mucho más que un deporte: Superación, equipo y familia: “Es nuestra oportunidad para mostrar lo que realmente es la NBA, dentro y fuera de la cancha”, dijo Philippe Moggio, vicepresidente senior de la NBA para Latinoamérica ¿Os gusta este cóctel? Lo volveremos a probar en la casa de Michael Jordan: Comienza la cuenta atrás para ‘Charlotte 2017’.