Y tú… ¿De quién eres?

En la vida, como en los zoos, encontramos todo tipo de “animalitos” y debemos aprender a coexistir en el mismo hábitat. En las sociedad actual y dentro de las empresas, existen tres tipos de perfiles que han tenido que adaptarse al gran reto de “entenderse” entre ellos… Cada uno, obviamente, somos de nuestro padre y de nuestra madre y es difícil poder agruparnos en un conjunto común… aunque es verdad que generacionalmente por la educación recibida, podemos diferenciarnos por la edad y costumbres… estamos hablando de la generación Baby Boomers, Gen X y Millennials. 

En mi caso, que actualmente tengo 45 años, en esta generación podríamos tomar como modelo el perfil empresarial de nuestros padres…

• Se denominan así por la gran cantidad de bebés nacidos después de la Segunda Guerra Mundial en países como Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda.
• Su mayor contribución es la expansión de la libertad individual, se les suele asociar al apoyo de los derechos civiles, las causas feministas en la década de 1970, los derechos de los homosexuales, los discapacitados, así como el derecho a la intimidad.
• Muchos se enfocaron en hacer una carrera universitaria, aumentaron el porcentaje de graduados universitarios en esta generación.
• El dinero que llegaron a ganar los hizo deslumbrarse con el mundo del capitalista. Tienen lo ingresos más altos del promedio de personas.
• Sus hijos se vieron afectados, pues sus padres se iban de viaje y ellos se quedaban solos en las mansiones que construyeron con sus altos ingresos.
• Un alto porcentaje forman parte de la vida política, cultural, industrial y académica de la sociedad.

En cambio, aquí podríamos estar hablando directamente de mi perfil profesional…

• Se denomina a la generación nacida entre 1963 y 1980, se llaman así haciendo alusión al deseo de ser alguien en la vida.
• Son responsables, se preocupan y comprometen por el mundo.
• Son grandes impulsores de la tecnología, aunque al segmento más longevo de esta generación, Internet, las redes sociales y el comercio electrónico todavía les resulta extraño.
• El ocio significa salir y encontrarse con personas y disfrutar del aire libre, en vez de encerrarse con los juegos muchas horas. Fueron los que aprendieron a jugar en la calle, los primeros usuarios del chat y los últimos en usar «pelo largo» y las litronas.
• Las mujeres tienen más éxito en el campo profesional. Demuestran mayores aptitudes y conocimientos que algunos hombres. Si tienen ingresos superiores a los de su cónyuge aumentan los riesgos de divorcio.

• No quieren saber nada de los valores de sus antecesores, rechazan sus personalidades, religiones y algunas de sus tradiciones.
• El sexo y las drogas lo ven como una escapatoria al aburrimiento o la monotonía. Algunos viven en una fiesta sin parar y no se involucran en una relación formal.
• Se han acostumbrado al trabajo en equipo. Les importa menos las jerarquías, les gusta tratar y ser tratados como iguales. Se comunican con menor diplomacia con sus superiores, son más abiertos y directos. Es la primera generación que no les importa la condición sexual (hombre o mujer)de sus jefes.
• Para ellos es de suma importancia disfrutar de una vida independiente al trabajo.
• No tienen miedo de actualizar su currículum y buscar mejores oportunidades, no se quedan en una misma compañía por lealtad.

• Son más audaces que los Baby Boomers, ya que no viven tan apegados al valor de la honestidad, para ellos la verdad no es algo primordial, ya que consideran que la frontera entre la verdad y la mentira hay que tirarla abajo para aliviar el estrés que produce y poder ser más felices.
• Les encantan los juguetes tecnológicos y estar al día compitiendo con las aptitudes tecnológicas de los Millennians o Generación Y.
• Prefieren ignorar la política, están absolutamente desilusionados de los políticos.
• Esta generación vive el presente, es lo más importante para ellos.
• No hace mucho caso a la publicidad, pues han visto, oído y olido casi todo lo que es anunciado, pocas cosas les sorprenden, por eso son muy followers de los influencer y los bloggers de las prescripciones de estos en las redes sociales.

Aquí podríamos incluir a los hijos de la Generación Y, a mis hijos en el caso que fuese madre…

• Personas nacidas entre 1980 y 1995. Se denomina a la generación que se hizo mayor de edad con la entrada del nuevo milenio. Nacieron en una época de prosperidad económica, los niños vivían en hogares seguros y confortables.
• En España hay 8.153.428 de Millennials, existen poco más de 1.700 millones en todo el mundo. Solamente en Estados Unidos hay entre 79 y 80 millones.
• Son criticados por serimpacientes, malcriados y sobre todo, por tener un título académico. Aunque gracias (o por culpa) de la crisis económica que ha explotado en los último años, han tenido que cambiar.
• Una generación que en España ha pasado gran parte de su existencia disfrutando de los mayores niveles de bienestar, pero que ahora vive un duro despertar.
• Gran parte de ellos están afectados por el paro, sin embargo, hasta ahora han tenido hasta 111% más poder de compra que sus padres.
• Son, desde el punto de vista del marketing, “compradores quisquillosos”, ya que quieren el tener el control total de esta experiencia de compra, necesitando libertad para probar y buscan sentirse al mando. Aquí está la nueva era de los influencers o prescriptores de producto.

• Es decir, son la población ideal para las marcas y vendedores, sin embargo, se dividen entre subgrupos que tiene diferentes actitudes frente al gasto y el ahorro.
  • Los «exploradores»: Chicos entre 15 y 17 años que compran para conocerse. Gastan lo que tiene sin más, no tienen una consciencia clara del ahorro.
  • Los “conscientes”: La siguiente franja va de los 18 a los 24, aunque todavía se están conociendo ya tiene más sentido del ahorro.
  • Por último “los establecidos”: Son los mayores de 25 años, compran cosas que ven como una inversión.

• En el terreno laboral:
  • Son una de las generaciones más preparadas “mis jefes pueden aprender mucho de mi”. Le dan mucho valor a la formación continua en el trabajo.
  • Aunque al incurrir en el mercado laboral se encuentran con contratos en practicas o temporales. Más del 50% prefieren no tener empleo a estar en un trabajo que odien. De hecho, su elección de carrera no estuvo definida por el salario sino por el estilo de vida.
  • Esto corresponde a la idea de su sentido de la vida. Quieren estar cómodos en el ambiente laboral. Tiene una mentalidad más abierta de “vivir la vida” y no tan agresiva como la de sus padres que trabajaban solo para ganar dinero y obtener un buen puesto en una empresa. Los millennials exigen que les dejen ser originales en el trabajo, y eso incluye su estilo personal de vestimenta con el que se sientan cómodos.
  • Considera que “ellos deberían orientar a sus compañeros mayores cuando se trata de temas de tecnología”. Y lo más probable es que tengan algo de razón, ya que los Millennials fueron la primera generación que se ha criado bajo el paraguas de la tecnología, Internet y las redes sociales.
  • Necesita feedback de sus mentores o jefes, ya que piensan que solo así pueden saber cómo están haciendo su labores, a diferencia de las generaciones anteriores que prefieren alcanzar sus objetivos de manera solitaria.
  • Sus pocas ganas de adaptación a los actuales ambientes laborales le hacen migrar o fundar sus propios negocios. Sin embargo, las empresas están tratando de buscarles un espacio, ya que ante el riesgo económico actual, su energía, su inteligencia, sus amplios conocimientos y su saber hacer con la tecnología, serán esenciales para las organizaciones de alto rendimiento.
  • Son un riesgo a correr por las empresas, ya que son más propensos a aceptar responsabilidades mucho más pronto en sus carreras que las personas mayores que ellos, no tienen miedo de asumir retos aunque tengan metas un poco ambiguas, son conscientes o muy inteligentes en cómo conocer lo que se quiere en el mercado y saben trabajar muy bien en equipo.

En conclusión, aunque cada uno seamos de nuestro padre y de nuestra madre, tengamos una diferencia de edad y de cultura diferente, tanto personalmente, como en el ámbito laboral, debemos coexistir y aprender a saber cuales son nuestros puntos fuertes, para poder apoyarnos en ellos, pero conocer y valorar en aquellos que, nuestros colegas, independientemente de su edad y cultura, pueden aportarnos un valor añadido a nuestro desarrollo personal y profesional.