¿Cómo te pones tú el pañuelo para el pelo?
Por sus tejidos ligeros y sus estampados coloridos, los pañuelos en el pelo son una de las grandes tendencias de este verano
Los pañuelos son un atuendo clásico que, a pesar de desaparecer durante alguna temporada, siempre terminan volviendo con la misma fuerza. Gracias a sus estampados y colores nos ayudan a conseguir ese toque diferente, distinguido o elegante, alegrando cualquier look. Hay pañuelos grandes para cubrirnos en invierno, fulares ligeros para las noches de verano, pañuelos pequeños para llevar atados al cuello… las opciones son infinitas para cualquier época del año. Pero hoy queremos hablaros de otra de sus utilidades, la de cubrir y adornar nuestro cabello. ¿Sabes cómo usar bien los pañuelos para el pelo?
- Turbante: Existen turbantes que cubren la cabeza completa con una original lazada en la parte delantera y también podemos fabricarlos nosotras mismas, si tenemos un poco de gracia. El resultado es super original y está super de moda.
- Pirata: Quizás sea uno de los usos más frecuentes, utilizado también por los hombres cuando aprieta el calor. El pañuelo cubre toda la cabeza y se anuda en la parte de la nuca.
- Hippie: Este estilo es muy atractivo y muy fácil de conseguir colocando el pañuelo en forma de banda sobre la cabeza y atándolo en la nuca con un nudo. Se diferencia del anterior porque deja el cabello al descubierto.
- Coqueto: Con éste se consigue un efecto ‘diadema’ pero con una lazada o nudo en un lateral para conseguir un efecto ‘pin up’.
Los tejidos más empleados en los pañuelos de cabeza como el lino, la seda o la cretona, son resistentes pero finos al mismo tiempo, lo que los hace muy versátiles para jugar con ellos y muy cómodos para combatir el calor. Se llevan especialmente los estampados de flores y los de tonos dorados, siendo los lisos un poquito menos demandados.
Ahora que ya sabes cuáles son los tejidos y los estampados más utilizados, solo te queda practicar porque, no nos vamos a engañar, son muy favorecedores pero ponérselos bien requiere de práctica.