Llega a las pantallas ‘El fotógrafo de Mauthausen’
Mario Casas y Alain Hernández protagonizan una película que narra uno de los pasajes más trágicos de la historia moderna.
Esta película puso al límite a Mario Casas y también a Alain Hernández. Para sus interpretaciones de Francesc Boix y Valbuena respectivamente, tuvieron que seguir unas dietas extremas que les dejaron al límite. ‘El fotógrafo de Mauthausen’ es la historia real de un valiente, un español en ese campo de concentración, cuyo arrojo e iniciativa ayudó a detener a los cargos nazis.
Sinopsis: Con la ayuda de un grupo de prisioneros españoles que lideran la organización clandestina del campo de concentración de Mauthausen, Francesc Boix, un preso que trabaja en el laboratorio fotográfico del campo, arriesga su vida al planear la evasión de unos negativos que demostrarán al mundo las atrocidades cometidas por los nazis en el infierno del campo de concentración austríaco. Miles de negativos que muestran desde dentro toda la crueldad de un sistema perverso. Las fotografías que Boix y sus compañeros lograron salvar fueron determinantes para condenar a altos cargos nazis durante el juicio de Nuremberg en 1946 y al que Boix fue el único español que asistió como testigo.
La directora, Mar Targarona, tuvo razones más que poderosas para dirigir esta película. Ningún testimonio mejor en primera persona… “Nací en 1953, ocho años después del fin de la 2ª Guerra Mundial. A veces tengo la sensación de que me salvé de vivirla por los pelos. De niña no fui consciente de ello, fue algo que creció progresivamente a medida que me hacía mayor y devoraba películas que trataban el tema. Al principio, entre aquellos hechos y yo existía la distancia que proporciona lo ficticio. En los años 70 vinieron los documentales, libros y algo más de madurez que me permitieron entender paulatinamente la magnitud de los hechos”.
“La II Guerra Mundial fue un episodio de terror y crueldad que cambió el mundo de forma radical. Fue una carnicería tan catastrófica que ha dejado una profunda cicatriz en el subconsciente colectivo europeo. El régimen nazi provocó sesenta millones de muertos en el continente. Una ideología incomprensible y, en cambio, uno de los aspectos que más me fascinan de todo el conflicto. Hay algo en el nazismo que me resulta, sencillamente, alienígena. A pesar de mi interés por el tema a lo largo de los años, es algo que no comprenderé jamás”, afirma Mar Targarona.
“Hay algunas películas excelentes sobre campos de concentració y de todas ellas, mi favorita es la magnífica ‘La Lista de Schindler’, con la que Spielberg consiguió retratar los aspectos más desgarradores del holocausto. Pero él no lo contó todo. En los campos, a parte de judíos, había soldados polacos, rusos, gitanos, homosexuales… y españoles. Mauthausen y los subcampos que dependían de él recibieron el mayor número de prisioneros españoles. En total fueron encerrados allí 7.532, de los que murieron 4.816”, asegura la directora.
“Las hazañas heroicas de estos jóvenes no son de dominio público y deben reivindicarse y ser sacadas a la luz. Me emocionó saber que Francesc Boix, el protagonista de la historia, y un grupo de valientes, conservaron y sacaron del campo, bajo pena de muerte si los descubrían, toda una serie de negativos fotográficos. Gracias a ellos quedaron impresas para la posteridad las atrocidades cometidas por las SS. Es impactante ver a Francesc Boix declarando en los juicios de Nuremberg, señalando a los verdugos, acusándolos con pruebas de que ellos sí sabían lo que ocurría en esos campos.
Es un ejemplo real e histórico en el cual los villanos son llevados ante la justicia por la valentía de unos pocos. Con esta película quiero honrar a esos héroes y a todas las víctimas de Mauthausen. El guion, escrito por Roger Danés y Alfred Pérez-Fargas, es excelente, y nos muestra muchas de esas cosas aún desconocidas sobre los campos, además de describir a unos personajes humanos sufriendo en sus propias carnes los conflictos morales de colaborar o morir, convertirse en héroes o sobrevivir”, concluye Mar Targarona.