La alquimia del café con leche según Nespresso

Nespresso presenta tres capsulas de café especialmente diseñadas para mezclar con leche y disfrutar de auténticas creaciones dignas del mejor barista.

Juan Cabal. 14/05/2019

Seis años de duro esfuerzo e investigación han tardado los responsables de Nespresso en dar con las cápsulas perfectas para aquellos que prefieren tomar el café con leche. Un proceso que no ha sido sencillo y en el que se han llegado a elaborar 122 prototipos de cápsulas diferentes, todas ellas con un tueste y molienda distinto, único y medido hasta el extremo. Se han probado algo más de 20.000 cappuccinos con muestras de café procedentes de hasta 18 orígenes distintos.

Datos que en definitiva ponen de manifiesto la importancia que supone para Nespresso haber conseguido tres cápsulas que den repuesta a casi ocho de cada diez consumidores de café (el 74 % de los consumidores beben su café siempre o casi siempre con leche, cifra que aumenta en España hasta el 87 %). Todas ellas agrupadas por Nespresso bajo el lema Barista Creations y que presentaba en sociedad hace escasos días Damián Seijas, el embajador en España de la firma.

Para la creación de Corto, Nespresso se ha inspirado en España

España ha inspirado a Nespresso para la creación de uno de sus cafés

«Cada cápsula de Nespresso está diseñada para que tenga un sabor perfecto, tanto para tomar como café solo o combinarlo con leche. Pero lo que hemos hecho ha sido un estudio meticuloso en el que se han implicado a numerosos expertos de distintas disciplinas para crear un café que sea fantástico al combinarlo con leche», asegura Damián Seijas antes de mostrarnos las distintas combinaciones que podemos realizar en casa para obtener un café digno de la mejor cafetería del momento.

España ha sido el lugar donde los especialistas de la marca se han inspirado para crear una de las tres cápsulas: Corto. Y en Nespresso España están muy orgullosos del resultado, como nos explica el director de marketing de la firma, Jaime de la Rica: «Llevamos años estudiando la interacción de la leche y el café así como los hábitos del consumidor que reflejan esta tendencia. Por ello, hemos querido dar a conocer la cultura de café y leche que existe en nuestro país y cómo el momento desayuno es el elegido por los consumidores para experimentar los sabores y matices de esta extraordinaria alquimia».

Damián Seijas, el embajador en España de Nespresso, fue el encargado de presentar los tres cafés

Sabores del mundo para combinar con leche

Corto nos traslada al resultado final que podemos obtener puesto que su receta perfecta se basa en el clásico café cortado que podemos pedir en las cafeterías españolas. Y eso a pesar de que según los estudios elaborados por Nespresso, existe gran confusión en España al respecto de cómo se realiza un buen cortado, sobre todo entre los que tienen entre 25 y 34 años: el 20 % de los españoles comprendidos en esa franja de edad considera que el cortado contiene más leche que café y el 11 % de la población de entre 16 y 24 años, no sabría identificar la receta.

El barista Damián Seijas nos confirma con su buen hacer que con una cápsula de Corto y gracias a su tueste oscuro y textura densa, se consigue un café que es capaz de perforar la leche con su amargor a través de un cuerpo denso y cremoso. Añadiendo un poco de leche caliente y espuma coronando la taza, se permite recrear en casa la clásica receta del cortado tradicional perfecto.

Sabores del mundo especialmente diseñados para combinar con leche

Para la creación de Chiaro, los especialistas de Nespresso viajaron a Nueva York. Inspirados en los baristas de Brooklyn, han creado un café que presenta deliciosas notas de galletas y caramelo cuando se combina con leche. «Si necesitas añadirle azúcar a una café con leche, es que algo durante el proceso de la creación del café no ha ido bien. Chiaro nos va a llevar con el sabor y el aroma al mundo de la pastelería, con notas de bizcocho o de canela», asegura Damián Seijas.

Y por último, Scuro que nace de la inspiración australiana, concretamente de los coffee-shops de Melbourne. Un café perfecto cuando se busca un balance de sabor, con un perfil intenso pero también lo suficientemente tostado como para convertirse en un cappuccino intenso o Latte Macchiato a través de la leche que, con su delicada dulzura, atenúa su intensidad.

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