Una inversión récord consolida a Iberdrola y su liderazgo en renovables
Iberdrola destinó 8.158 millones de euros en 2019, un 32% más, a redes y energías limpias para contribuir a frenar el cambio climático.
«Iberdrola demuestra año a año que su modelo de negocio sostenible crea valor para los accionistas, los empleados y la sociedad en su conjunto», ha destacado Ignacio Galán, presidente del grupo, durante la presentación de resultados de la compañía, que han alcanzado un nivel histórico, gracias a las inversiones realizadas y a la apuesta por las renovables.
La empresa española, segunda compañía del Ibex por valor en Bolsa, ha establecido un modelo de beneficios con el que ganamos todos. Así, ha realizado compras por 20.000 millones de euros a más de 22.000 proveedores; ha invertido 270 millones de euros en I+D+i durante 2019, situándose así en el top 3 mundial del sector. Además, ha desarrollado un programa de voluntariado internacional con 7.500 participantes; ha mejorado su calidad de servicio un 10%; ha mantenido sus emisiones de CO2 dos tercios por debajo de las de sus competidores tanto nacionales como europeos; y ha continuado, además, siendo el líder privado global en financiación verde, entre otros aspectos destacables.
Una compañía que modificó su modelo energético hace 20 años
En lo que se refiere a sus empleados, Iberdrola se mantiene como un referente de empleo estable y de calidad. Así, tras realizar casi 3.500 nuevas contrataciones durante el pasado año, prevé seguir creando puestos de trabajo con unas 5.000 nuevas incorporaciones en 2020.
Mirar hacia el futuro es lo que les ha llevado a ser líderes de la transición energética. Según Ignacio Galán, estos resultados reflejan la visión estratégica y la capacidad de ejecución de la compañía, que les han permitido anticiparse en 20 años al actual proceso de cambio de modelo energético al que se están adaptando ahora otras empresas, con el fin de dejar atrás los combustibles fósiles y apostar por las renovables.
Un beneficio histórico de 3.406 millones de euros
Iberdrola lleva ya 20 años centrada en criterios medioambientales, sociales y de buen gobierno (ESG) y está absolutamente comprometida con la ética, la transparencia y el gobierno corporativo. Este compromiso se ha visto reforzado con la inclusión en sus Estatutos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
Con un beneficio neto de 3.406,3 millones de euros en 2019, logra una cifra histórica que supone un incremento del 13% respecto al ejercicio anterior. Este resultado ha sido impulsado por las inversiones récord que el grupo ha llevado a cabo durante el año y que han ascendido a 8.158 millones de euros, un 32% más, principalmente destinadas a renovables y redes inteligentes.
Nuevas inversiones en energía renovable
Continuando con datos positivos, también el beneficio bruto de explotación (Ebitda) ha marcado un nuevo hito en la historia de la compañía, al superar por primera vez los 10.000 millones de euros (10.104 millones de euros), tras incrementarse un 8,1% en el ejercicio.
Del importe total de inversiones, un 44% se ha destinado a redes y un 41% a renovables. Estas áreas han reforzado su ritmo inversor un 19% y un 85%. Como resultado, la compañía ha instalado 5.500 nuevos megavatios (MW) en todos sus mercados durante 2019, frente a los 1.000 MW de media de los años anteriores. A esta nueva capacidad se añadirán para 2021 y 2022 los 9.000 MW que Iberdrola ya está construyendo en la actualidad en España, Portugal, Reino Unido, Estados Unidos, México, Brasil y otros nuevos mercados como Australia. La compañía cuenta además con una cartera de proyectos para desarrollo que suma más de 40.000 MW en todo el mundo.
Una apuesta clara por la energía verde
La compañía ha logrado ofrecer a sus más de 600.000 accionistas una revalorización de la acción y de los dividendos pagados en el año del 37% y acumula un crecimiento del dividendo del 47,6% en los últimos cinco años.
En líneas generales, la compañía energética prevé invertir más de 10.000 millones de euros a lo largo de 2020, un 40% más que la media de los últimos tres años. Esto se traducirá en hasta 4.000 nuevos MW de capacidad instalada, un 8% más, y en un incremento de en torno al 4% de la base de activos regulados.
Asimismo, el negocio de redes se verá impulsado por nuevos acuerdos de tarifas, el de renovables por una mayor capacidad en operación y el de generación y clientes, por una mayor producción.