BMW invierte en la creación de acero libre de CO2
El fabricante alemán de automóviles invierte en la startup Boston Metal que ha desarrollado un método que reduce a cero la emisión de CO2 en la fabricación de acero.
La sostenibilidad en la automoción no sólo afecta a los motores. BMW se ha vuelto a adelantar a buena parte del sector al anunciar cambios relevantes en su sistema de producción de acero. La compañía está invirtiendo en un método innovador para la producción de acero sin CO2. Un sistema desarrollado por la startup estadounidense Boston Metal y en el que BMW ha invertido a través de su fondo de capital de riesgo, BMW i Ventures. En los próximos años, Boston Metal planea expandir el nuevo método para la producción de acero a escala industrial.
La inversión es parte de las actividades de sostenibilidad de gran alcance de BMW destinadas a reducir significativamente las emisiones de CO2 en toda la red de proveedores. La compañía espera que para 2030 las emisiones de CO2 deberían ser aproximadamente dos millones de toneladas más bajas que la cifra actual.
BMW invierte en un novedoso sistema de fabricación de acero
Con sus propiedades versátiles, el acero es uno de los materiales más importantes en la producción de automóviles y no será menos importante para las futuras generaciones de vehículos. Incluso con el aumento dinámico de la electromovilidad, el acero seguirá siendo un material de construcción importante para las carrocerías de automóviles y muchos componentes. Las plantas de prensado de BMW en Europa procesan más de medio millón de toneladas de acero al año. “Hemos identificado las materias primas y los componentes de nuestra red de proveedores con las mayores emisiones de CO2 de la producción. El acero es uno de ellos, pero es vital para la producción de automóviles. Por esta razón, nos hemos fijado el objetivo de reducir continuamente las emisiones de CO2 en la cadena de suministro del acero”. La opinión es de Andreas Wendt, responsable de la red de proveedores de BMW.
Los altos hornos utilizados en la producción de acero convencional generan dióxido de carbono. La startup Boston Metal utiliza electricidad para su nueva tecnología, que, mediante una celda de electrólisis, produce arrabio que luego se transforma en acero. Si se utiliza electricidad procedente de energías renovables para este proceso, la producción de acero está libre de carbono. La joven empresa construirá instalaciones de demostración para este proceso durante los próximos años y lo desarrollará aún más para su uso a escala industrial.