Charlène de Mónaco, y su viaje más especial a Sudáfrica para salvar rinocerontes
Charlène de Mónaco sorprende al mundo con unas espectaculares fotografías abrazando rinocerontes en Sudáfrica.
A pesar de que lleva más de diez años viviendo en Mónaco, la princesa Charlène sigue manteniendo unos lazos estrechos con su Sudáfrica natal. En estos días la esposa del príncipe Alberto ha vuelto a su casa y ha sorprendido al mundo con unas impactantes imágenes junto a un rinoceronte blanco herido. La princesa dejaba atrás los lujos y comodidades de palacio para conocer de primera mano la complicada situación de estos animales en el país africano. Una labor solidaria y de conservación animal que ha dado la vuelta al mundo, y con la que pretende concienciar sobre la lacra de la caza furtiva en el país.
Charlène de Mónaco y su lucha por salvar a los rinocerontes
Charlène de Mónaco ha mostrado en redes sociales una de sus facetas más desconocidas, su pasión por los animales. Con una impactante imagen de ella abrazada a un rinoceronte blanco, la princesa escribía «Gracias por no olvidarnos». Y es que haber nacido en la cuna de los safaris ha hecho que la princesa sea una fiel defensora de la conservación animal, por ello, no ha dudado en prestar su ayuda para visibilizar la complicada situación que viven los rinocerontes en Sudáfrica.
En los últimos años varias ONGs se han volcado en intentar salvar a los rinocerontes de la extinción, después de que en el último tiempo se haya multiplicado su caza furtiva. El motivo de esta masacre es el elevado valor que alcanzan sus cuernos en el mercado negro, los cuales son famosos por sus supuestas propiedades curativas y mágicas. Un kilo de cuernos de rinoceronte puede llegar a alcanzar los 60.000 u 80.000 dólares, lo que ha provocado que estos animales se hayan convertido en el objetivo de cazadores furtivos.
Manda un mensaje de no a la caza en Sudáfrica
Ante esta grave situación, Charlène de Mónaco ha viajado hasta su país natal y se ha fotografiado junto a estos animales, con el fin de acabar con la caza en Sudáfrica. Luciendo una sudadera de estampado de camuflaje y un pantalón de chándal negro, Charlène se ha interesado por saber un poco más de estos animales e incluso ha participado en la extracción de cuernos del rinoceronte. Y es que las ONGs han visto en esta práctica la única manera de frenar su caza, aunque es una medida muy controvertida que ciertos grupos critican, pues tiene efectos sobre la salud de los animales.
Muy implicada con la conservación animal, Charlène de Mónaco no ha dudado en tirarse al barro e impactar al mundo con sus fotografías junto a los rinocerontes. Sin duda, una prueba más de que la esposa del príncipe Alberto no es una princesa al uso.