Piscina de bolas y un pasadizo secreto, así es la casa de Cara Delevingne en Los Ángeles
Cara Delevingne abre las puertas de su surrealista y lujosa mansión de Los Ángeles, inspirada en el sombrero loco de Alicia en el País de las Maravillas.
En ocasiones viendo cómo es una persona se puede adivinar cómo será su casa. Y en el caso de Cara Delevingne esto se ajusta a la perfección. Su personalidad, alocada, rebelde, sexy, divertida y original está presente en todos rincones de su espectacular mansión de Los Ángeles. La modelo ha abierto las puertas de su casa para protagonizar un surrealista vídeo de Architectural Digest, en el que ha mostrado todas y cada una de las estancias de la mansión inspirada en el Sombrero Loco de Alicia en el País de las Maravillas. Pasadizos secretos, un túnel con forma de vagina, una piscina de bolas y artículos de lujo repartidos por todos lados son solo algunos de los detalles de la casa de Cara Delevingne.
Cara Delevingne muestra los rincones de su “casa para adultos”
Aunque por fuera parece una sencilla casa de ladrillo blanco, tras las puertas se encuentra la “casa de juegos para adultos” de Cara Delevingne. Así es como la propia modelo define su vivienda de Los Ángeles, y lo cierto es que la definición no puede ser más acertada. Nada más entrar los colores, las formas y los llamativos papeles pintados de las paredes captan toda la atención. Y es que no hay rincón donde la vista pueda descansar.
La casa fue diseñada por el arquitecto Nicolò Bini a quien la modelo describe como el Sombrerero Loco de su particular versión del clásico cuento de Lewis Carroll. Y no es para menos, puesto que la casa es una fantasía total. La vivienda solo cuenta con dos dormitorios, uno de invitados y otro para Delevingne. Aunque más que dormitorio tendríamos que hablar de suite, ya que cuenta con vestidor, armario para zapatos, baño, terraza con jardín y un pequeño salón.
Tiene una piscina de bolas, un túnel con forma de vagina y una habitación para sombreros locos
Pero esto no es nada. Y es que a la mansión no le falta detalle. Junto a los dos salones principales, los tres bares y la cocina, la vivienda cuenta con un túnel secreto inspirado en una vagina, una especie de pasadizo a través del cual puedes acceder a uno de los dormitorios. La verdad es que conociendo a Cara Delevingne, esto no es de extrañar, como tampoco lo es su escondite secreto.
En una pequeña sala de juegos, la modelo tiene una pared falsa, que en realidad es una puerta hacia el paraíso de los adultos y los niños. Y es que en el segundo piso, Delevingne tiene estancias tan pintorescas como una habitación de sombreros locos y divertidos, una sala para disfraces, zona de cine, piscina de bolas y un salón de recreativos. En esta última cuenta con máquinas de juegos vintage, una Jukebox de los 60, instrumentos para tocar con una banda de rock y un pintball de Playboy. Y es que, según cuenta la modelo, “Hugh Hefner es una gran inspiración para esta casa. Es como mi mansión Playboy”.
Las grandes firmas de lujo son las protagonistas de la decoración
A pesar de que la casa es una auténtica locura, lo cierto es que está repleta de objetos lujosos y muy valiosos. Nada más entrar a la mansión te recibe un cuadro de James Turrell, una obra surrealista que puede superar los 700.000 dólares. Junto a ella tiene colocado un espectacular piano Wurlitzer transparente que, según confiesa, adora tocar desnuda, y cuyo precio supera los 20.000 dólares. Aunque este no sería el instrumento valioso de la casa, puesto que tiene colgada de la pared una guitarra firmada por el difunto David Bowie, del que se declara fan absoluta.
Su pasión por la moda y las firmas de lujo también está presente en todos los rincones. La modelo tiene una tabla de surf de Chanel, una guitarra de la misma firma, un guante de boxeo de Balmain, papel pintado de Gucci, y cada noche duerme tapada con sábanas de Christian Dior. Todo un lujo a la altura de la espectacular y loca mansión de Delevingne.