Jack Dorsey, CEO de Twitter, le hace el vacío al príncipe Harry

Jack Dorsey, CEO de Twitter, hace caso omiso de los correos electrónicos del príncipe Harry. Algo que sucede desde que éste le afeara el comportamiento de la red social que dirige durante el asalto al Capitolio. Así lo ha confirmado el nieto de Isabel II en una videoconferencia en la que se analizaba el papel de las redes sociales y la desinformación. Harry fue un paso más allá, cuando se le preguntó sobre si compartía sus inquietudes sobre este tema con algunos de los grandes directivos de Silicon Valley.

Harry, que forma parte de ese selecto gremio desde que encontrara trabajo en la tecnológica BetterUp, dijo que hasta principios de este año se carteaba frecuentemente con el directivo de Twitter y con el propio Mark Zuckerberg. Pero todo cambió justo un día antes del 6 de enero, cuando estallaron los disturbios en Washington de los partidarios de Donald Trump.

El príncipe Harry denuncia el silencio de Jack Dorsey

«Jack Dorsey y yo nos enviábamos correos electrónicos antes del 6 de enero… le advertí que su plataforma estaba permitiendo que se organizara un golpe de estado. Ese correo electrónico fue enviado el día anterior y pasó lo que pasó. No he tenido noticias de él desde entonces», aseguró el príncipe Harry. La justicia investiga desde entonces los acontecimientos y la implicación penal que tuvieron algunas redes sociales en la difusión de las teorías sobre un supuesto fraude electoral que dieron pie a la revuelta del Capitolio.

Desde su paso por la realeza, el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle son muy críticos con el papel de las redes sociales. Entre otras cosas porque ambos las culpan de gran parte de la presión que no supieron gestionar mientras paseaban por los pasillos de Buckingham. El propio Harry definió este miércoles a Internet como «la Red del odio, la división y las mentiras»; e hizo un símil dietético que muchos asumirán como propio en breve: «Todos podemos alimentarnos. Pero si somos conscientes de nuestra dieta digital y de lo que consumimos todos los días, tal vez seamos más conscientes de lo que transmitimos y de lo que no hacemos. Lo que consumimos afecta a la forma en que pensamos».