La impresionante mansión que Lady Gaga ha vendido a Lizzy Jagger por 6,5 millones
Un edificio estilo Neotudor, que perteneció a Frank Zappa, define a la impresiónate vivienda que Lady Gaga le ha vendido a Lizzy Jagger en Los Ángeles.
Nuestro más inmediato entorno es nuestra principal fuente de bienestar y riqueza, así como de disgustos y gastos. Por motivos de salud mental, lo mejor es saber torear a las segundas fuentes y entronar a las primeras. Por esta razón, es más fácil encontrar compradores de nuestras posesiones cuanto más vínculos se comparten, y es bastante habitual la transacción de inmuebles entre personas del mismo entorno o singularidad social.
Lady Gaga le vende su mansión a la hija de Mick Jagger
Los famosos en esto son como el resto de mortales. Lady Gaga hizo gala de esta circunstancia este mes de noviembre. La cantante vendió a Elizabeth Jagger, hija de Mick Jagger y Jerry Hall, una exquisita mansión en Hollywood Hills, Los Ángeles, el lugar del mundo más nutrido de estrellas, de actuales, de pasadas y de venideras.
Lady Gaga sabe de números, ya que la mansión que compró en 2016 en el número 7885 de Woodrow Wilson Dr por 5.25 millones de dólares, ahora la ha vendido por 6.5 millones, lo que equivale a 1,25 millones más. En total y para que nosotros lo entendamos la cantante habría ganado 1.11 millones de euros.
La finca tiene un total de 2.266 metros cuadrados
La construcción del enorme edificio data de 1939, aunque según Realtor, hubo una reforma de importancia en 1970. Por los precios ya podréis imaginaros que se trata de una residencia exclusiva en un lugar ideal, rodeado de naturaleza, con miles de mansiones cercanas y, lo mejor, a tan sólo dos horas caminando del famosísimo letrero de Hollywood. Además, la residencia ha pasado por manos famosas en varias ocasiones, siendo la más llamativa la del compositor y músico Frank Zappa, quién la adquirió en 1970 por unos 75.000 dólares, 66.500 euros.
La residencia se posa sobre un solar de 2.266 metros cuadrados y posee 627 metros cuadrados construidos, lo que deja mucho espacio para dos casas más de huéspedes y una fantástica piscina, pool, siempre pool. Posee siete habitaciones y seis baños, cocina, salón principal, sala de juegos, sala de música, porche para pin pon y juegos de mesa, habitación de masajes, cancha de tenis en la azotea, galería de arte, invernadero, etc. Todo esto sin contar con las casas de invitados.
Su cubierta de madera es lo más destacado
Digna de estudio es su cubierta que, debido a abarcar una gran superficie y a tener varias alturas, se ve obligada a realizar varios paños diferentes de aleros, muchos de ellos con claraboyas para proveer de luz a diversas estancias. Lo podemos ver en la cocina, a pesar de tener un hermoso comedor y estar conectada con el exterior del inmueble con grandes ventanales y puertas.
A mí, personalmente, me ha convencido mucho la sala de masajes, con su estructura de madera, con su cálido pavimento, del material mentado, sus ventanas en esquina frente a una zona rocosa del jardín y, no menos desdeñable, una parte del habitáculo con doble altura. Un lugar tan especial que da envidia.
Lady Gaga apenas vivió en la mansión
El exterior conserva vestigios del estilo Neotudor con el que fue diseñado, sobre todo su envolvente. El resto se ha adaptado a los tiempos con baños modernos, falsos techos de los que emergen aire acondicionado y luminarias, y una decoración muy variopinta. Ésta responde muy bien al carácter transgresor de Zappa y, tal vez, al de Gaga, aunque no sabemos qué modificaciones hizo ésta en la residencia.
Es evidente que una residencia de esta envergadura tendrá unos gastos acordes, máxime si pensamos que posee hasta un invernadero. Además del jardín con un mural de dragón, con ventanas y puertas de ojo de buey, que, según algunos medios, habían sido utilizados en submarinos reales. Si todo va bien, la nueva propietaria podrá adaptarse a la vivienda respetando aquello que posea valor estético e iconográfico, y reformando lo que merezca el esfuerzo.
