Bisbal, Mercé y Los del Río cantan para Hillary Clinton en el Palacio de Dueñas
Eugenia Martínez de Irujo y Narcís Rebollo celebraron una fiesta española en el Palacio de Dueñas con invitados de excepción.
No hay duda del compromiso que Eugenia Martínez de Irujo y su marido, Narcís Rebollo, tienen con la música y el arte. Por eso no es de extrañar que ayer abrieran el Palacio de Dueñas para celebrar en él una fiesta de música con mucho sabor español en honor a una invitada de lujo. La ex-primera dama estadounidense, Hillary Clinton, se encuentra en Madrid para participar en una conferencia y no dudó en aceptar la invitación de Eugenia y Narcís para disfrutar de la fiesta en su honor.
Invitados de lujo para Hillary Clinton
La celebración contó, como era de esperar, con artistas de gran prestigio y trayectorias reconocidas. Es el caso de David Bisbal, Vanesa Martín, Pablo López, José Mercé, Farruco o Manuel Carrasco. Todos aportaron su granito de arena para, con su arte, convertir la noche en una velada única.
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Entre el exclusivo grupo de invitados se encontraban la infanta Elena; el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno; así como la embajadora de Estados Unidos en nuestro país, Julissa Reynoso. Una enamorada de la música y el arte español que ha recibido en la embajada a artistas españoles en diferentes momentos.
Actuaciones para el recuerdo
Así, algunos de los momentos más emocionantes de la noche fueron la actuación de José Mercé; o cuando David Bisbal cantó a dúo con Vanesa Martín un tema de Rocío Jurado con Pablo López al piano. Para recordar también cuando Los del Río interpretaron La Macarena, un tema popular en la campaña presidencial de Bill Clinton en 1996 y que su esposa Hillary no dudó en cantar y bailar con los presentes.
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Para la ocasión la duquesa de Montoro, anfitriona del evento, eligió un colorido vestido largo con flores blancas y rojas sobre fondo negro. Por su parte, la ex-primera dama estadounidense lució un pantalón negro con botines de tacón sensato al tono y un abrigo blanco con chal florido por encima.
La fiesta de ayer demostró que la música no tiene fronteras, que une almas y alegra el corazón. Algo que defienden siempre que pueden los duques de Montoro, como ayer, elevando la Marca España al primer nivel.
