El corazón del running

Un gran corazón y una eterna sonrisa impulsan la zancada del gran Chema Martínez.

Gonzalo Martín Villa. 14/04/2015
Chema Martínez. Foto: redbull
Chema Martínez. Foto: redbull
Chema Martínez. Foto: redbull

La semana pasada se celebró el maratón Des Sables, una de las carreras más duras del mundo. Se trata de una travesía de 250 kilómetros en seis etapas por el desierto del Sahara en la que los corredores deben llevar su propio avituallamiento. Chema Martínez ha finalizado en quinto puesto, siendo el primer no africano de la prueba.

Chemita es un tipo increíble y me considero muy afortunado de tenerle entre mis amigos. Le conocí hace algunos años, cuando comenzó a colaborar con el programa Proniño de la Fundación Telefónica, dedicado a erradicar el trabajo infantil en Latinoamérica. Se retiró de la competición como atleta profesional en 2013 y contar su palmarés agotaría el espacio de este blog, pero literalmente no ha parado desde entonces. El año pasado terminó el reto de los cuatro desiertos (Atacama, Gobi, Sahara y Antártica), sigue corriendo carreras de todo tipo, participa en acciones benéficas y hasta se ha atrevido a presentar un programa de televisión y a escribir un par de libros. Si eso es retirarse que venga Dios y lo vea.

Chema Martínez junto a nuestro colaborador, Gonzalo Martín
Chema Martínez junto a nuestro colaborador, Gonzalo Martín

Pero Chema es mucho más que un magnífico atleta. Chema es una sonrisa a un hombre pegada, un ejemplo para todos los deportistas, un amigo dispuesto a ayudar siempre. Además de estar disponible siempre para darme consejos, he tenido el honor de correr con él en muchas ocasiones y especialmente dos maratones que hicimos mano a mano. Le pedí que me acompañara para bajar de 3:30 y lo intenté con él en dos ocasiones (Nueva York 2011 y Londres 2014), pero en ninguna de ellas pude lograrlo dándome de bruces con el famoso muro (ojo, nota para mi orgullo: logré bajar la marca algo después). En ambos terminé la prueba a pesar de la pájara y se lo debo sólo a él, pues animándome constantemente me empujó (literalmente en algún momento) hasta la meta.

Eres grande Chema Martínez. Sólo me queda un reto, logar que algún día se tome una cerveza conmigo, no es capaz, su cuerpo no tolera el alcohol. Tranqui Chemita, yo te entreno.

Relacionados

Últimas noticias

Subir arriba

Este sitio utiliza cookies para prestar sus servicios y analizar su tráfico. Las cookies utilizadas para el funcionamiento esencial de este sitio ya se han establecido.

MÁS INFORMACIÓN.

ACEPTAR
Aviso de cookies
Versión Escritorio