American Apparel: la peor evolución
En el tercer trimestre la compañía registró unas pérdidas netas de casi 20 millones de dólares.
American Apparel, la firma de moda estadounidense conocida por concentrar todas sus actividades de diseño, fabricación y distribución en un único lugar, ha publicado el mayor retroceso de sus ventas en cuatro años. Sus ingresos retrocedieron más de un 5% hasta los 155 millones de dólares.
Este retroceso se produce en medio del litigio que mantienen con su fundador y máximo accionista, Dov Charney, que fue apartado de sus funciones el pasado mes de junio por comportamiento inapropiado. El problema radica en que el destituido CEO no sólo ha presentado una batalla legal para recuperar su puesto, sino que ha elevado su participación accionarial por encima del 40%. Esto ha provocado que el Consejo de Administración no haya nombrado un nuevo CEO y se esté incluso replanteando readmitir a Charney aunque con menos poderes ejecutivos.
Sea como sea, lo cierto es que esta lucha deja un claro vacío en la gestión estratégica de la firma que se deja notar en los resultados. En el tercer trimestre, la compañía registró unas pérdidas netas de casi 20 millones de dólares, frente a los 1,5 millones perdidos en el mismo trimestre del año anterior. También se deja notar en bolsa, donde la capitalización bursátil de la firma se ha desplomado casi un 40% en lo que va de año.
Otra de las consecuencias de la falta de liderazgo claro es el problema de tesorería al que se enfrenta la compañía. Tiene 9 millones de dólares de liquidez y está negociando un crédito de 15 millones con Standard General, que pide como condición que se modifique sustancialmente la composición del actual Consejo de Administración. Para presionar tiene a favor un crédito ya concedido a American Apparel de 10 millones de dólares que está en claro riesgo de default, ya que la compañía no puede hacer frente a su pago en la actualidad.