Bailey se queda a cuadros
Burberry retoca las labores de Christopher Bailey y ficha a Marco Gobbetti para dar un nuevo rumbo a la firma británica.
Burberry prescinde de Christopher Bailey como consejero delegado al no alcanzar los resultados esperados. Un movimiento que el mercado esperaba desde hace semanas y que deja a Bailey como director creativo y presidente. Este último cargo no le supondrá labores ejecutivas, ya que para eso la firma británica ha fichado a Marco Gobbetti como nuevo consejero delegado.
Los analistas esperan que Gobbetti proporcione un nuevo rumbo al grupo. Por lo menos sus funciones no le serán desconocidas ya que ha ejercido como consejero delegado en Céline, compañía perteneciente al grupo LVMH, durante los últimos años. La llegada del italiano a Burberry no se producirá hasta principios de 2017. En los últimos dos años Bailey ha tenido que soportar numerosas críticas por parte de los accionistas e inversores de Burberry dada su escasa formación como directivo.
Los cambios en Burberry también afectan a la dirección financiera. Carol Fairweather, que ha colaborado con Bailey desde que fuera nombrado en 2014, dejará su puesto en Burberry a Julie Brown, una ejecutiva que proviene de un sector que poco o nada tiene que ver con el lujo, pero donde las cuentas también son importantes. Brown ha llevado las cifras hasta ahora del grupo de tecnología médica Smith and Nephew.
Bailey deja a Burberry bastante tocada. La compañía está inmersa en un plan de ahorro de costes que se acerca a los 100 millones de libras, en plena incertidumbre sobre los efectos del Brexit en su negocio y con descensos en las ganancias y unas ventas estancadas.