China pone sus ojos en Bally
Dos compañías chinas pujan por adquirir la empresa suiza especializada en calzado y complementos en piel.
Dos empresas chinas pujan por adquirir la compañía de productos de lujo Bally, el fabricante suizo de calzado, zapatos y complementos en piel cuya venta podría rondar los 600 millones de euros. Las ofertas presentadas por Fujian Septwolves y Fosun son al parecer las que más han gustado al grupo industrial JAB Holding (propietario de Bally), que se encuentra en pleno proceso desinversor y que ya protagonizó a comienzos del verano la venta de Jimmy Choo a Michael Kors.
Septwolves fue creada en 1990 y en los últimos años se ha hecho fuerte en el mercado chino de ropa de hombre con el éxito de marcas como ‘Wolf Totem’ y ‘Owooo’. También ha tenido relación con el lujo a través de la licencia china de los productos de Karl Lagerfeld.
El grupo Fosun tiene sede en Shanghái y forma parte del accionariado de firmas internacionales como la italiana de trajes de hombre Raffaele Caruso, la de moda femenina St. John y la marca griega de accesorios, Folli Follie.
Bally es una de las marcas históricas del mundo del lujo. Su nacimiento se produjo en 1851 y sus colecciones incluyen todo tipo de complementos en piel, desde mocasines a botas, pasando por bolsos, mochilas y bandoleras e incluso carteras, cinturones y ropa.
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