La posible privatización de los diamantes rusos
El gobierno ruso buscaría compensar la caída de ingresos públicos privatizando alguna de sus empresas públicas más representativas como Alrosa.
Debido a la fuerte caída de ingresos por el bajísimo precio del petróleo, Vladimir Putin puede estar buscando vender algunas de las empresas más grandes del país, incluyendo la segunda mayor compañía minera de diamantes del mundo, Alrosa, según fuentes de Reuters. La Federación de Rusia posee actualmente el 44% de Alrosa, mientras que la administración local de Yakutia posee el 25%. Esta región, donde está ubicada la sede central de la compañía, es la zona habitada más fría del mundo con temperaturas que en invierno llegan a menos de 50 grados bajo cero.
La compañía cotiza en la bolsa de Moscú y tiene un porcentaje de propiedad privada del 23%. Hay una gran controversia acerca del posible método de privatización. Por un lado se teme que se vendan las acciones a un precio excesivamente bajo y a sectores cercanos al presidente ruso. Se habla de un posible retorno de capitales de empresarios rusos que tengan inversiones en zonas ‘of-shore’. Por otro lado, la tensa situación con los principales países occidentales en un contexto de sanciones mutuas hace difícil una adquisición ‘abierta’ por ejemplo a través de la Bolsa de Moscú. Además, un gran porcentaje de rusos se opondrían a una privatización de este tipo.
Un complicado 2015
Aunque Alrosa aumentó la producción de diamantes con respecto a 2014 alcanzando la cantidad de 36 millones de quilates, tuvo un ejercicio complicado por varias razones. En primer lugar, la caída del precio de los diamantes pulidos en casi un 18% fue la caída más grande desde 2008, lo que ha implicado una reducción en los márgenes de explotación.
Por otro lado, la compañía acumuló stock excesivo de diamantes sin vender, problema compartido por el otro gran productor mundial, que es De Beers. La situación fue particularmente grave en el tercer trimestre, en el que Alrosa sólo pudo colocar en el mercado el 40% de su producción. Como consecuencia de los hundimientos bursátiles de las bolsas chinas, la caída de la demanda en el gigante asiático fue palpable. En el cuarto trimestre Alrosa mejoró creciendo en ventas un 45 por ciento sobre el tercer cuarto, superando los 7 millones de quilates, en un momento de aparente recuperación de la industria. La compañía no ha desvelado la totalidad de sus datos financieros del cierre de 2015 pero se hace difícil pensar que pueda superar los 5 mil millones de facturación que alcanzó en 2014.
Las perspectivas para 2016 eran inicialmente buenas, se esperaba una reactivación de la demanda y una bajada en los precios esta vez más moderada, de alrededor de un 5 %. Sin embargo, está por ver el efecto que va a tener en el mercado de estas piedras preciosas el descalabro de las bolsas mundiales, las dudas sobre la economía china y la continuada caída del precio de las materias primas, en particular la del petróleo.
Primeras operaciones en 2016.
Según informaba Bloomberg, Alrosa habría cerrado una primera importante operación con diamantes brutos en los primeros días de 2016, con unos tiempos de negociación más grandes de los 10 días habituales y por un montante de unos 500 millones de USD. De manera similar a la primera gran operación de De Beers, en este caso por 540 millones de USD y después de haber reducido precios en un 7 %. Alrosa no ha desvelado detalles sobre los precios correspondientes en su operación.
Recordar que De Beers y Alrosa dominan dos tercios del mercado mundial de diamantes. Ambas compañías tratan de reducir su elevado stock en un momento en que las compañías pulidoras de diamante presentan unos márgenes cada vez más escasos. En medio de estos tiempos turbulentos, los tres grandes productores de diamantes (De Beers, Rio Tinto y Alrosa) han decidido formar la Asociación de Productores de Diamantes, con el objetivo de estimular la demanda y promover la imagen del diamante.
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