En los 13 días que llevamos de 2021, hay tres acontecimientos que ya han marcado el año. El primero, el asalto al Capitolio de Estados Unidos; el segundo, la gran nevada que ha dejado Filomena sobre Madrid; y el tercero, la serie Los Bridgerton. Y es que este drama de época de Netflix ha conquistado a los seriéfilos de todo el mundo.
Su estreno el día de Navidad fue seguido por más de 63 millones de espectadores. Un hecho que ha llevado a sus protagonistas a convertirse en las nuevas estrellas de la pequeña pantalla. El estilo, el drama y los personajes. Todo ha enamorado a la audiencia. Si tú todavía no has caído en su embrujo, prepárate, porque Los Bridgerton enganchan, y mucho.
La serie está basada en las novelas de la escritora norteamericana Julia Quinn, y su productora es, nada más y nada menos, que Shonda Rhimes, la creadora de series tan míticas como Anatomía de Grey y Scandal. Dos grandes expertas de la ficción que nos presentan a través del drama el ingenio y el humor, los cotilleos y culebrones de la alta sociedad Regency London.
Los Bridgerton narran la vida de Daphne Bridgerton, una joven perteneciente a una familia adinerada que debuta en la alta sociedad y en el competitivo mercado matrimonial. Un ambiente muy elitista en el que las familias solo quieren asegurar un buen marido para sus hijas y evitar salir malparadas en alguna de las mordaces crónicas sociales de Lady Whistledown, que todo el mundo lee, pero nadie conoce. Sin embargo, Daphne se resiste a acordar un matrimonio de conveniencia y busca el verdadero amor. Una crítica inteligente e irónica de la sociedad inglesa de principios del siglo XVIII.
Los protagonistas de la serie son Phoebe Dynevor, que da vida a Daphne Bridgerton y Regé-Jean Page, que se pone en el papel de Simon Basset, un joven duque del que se enamora Daphne. Ellos se han convertido en las nuevas estrellas de la pequeña pantalla, y al igual que le ha sucedido a Anya Taylor-Joy y la serie Gambito de Dama, su popularidad se ha disparado. Un hecho que les ha llevado a protagonizar miles de titulares en la prensa y consolidar una prometedora carrera en cine y televisión.
Y es que la buena química Phoebe Dynevor y Regé-Jean Page trasmiten a través de la pantalla, sobre todo en las escenas de cama, ha hecho saltar las alarmas de la prensa del corazón, que enseguida les ha relacionado. Ellos, aunque han dicho que esa química es por exigencias del guion, no han desmentido los rumores, e incluso han jugado con ello. «Todo lo que necesitas saber está en cámara», decía Regé-Jean Page en una entrevista para Access.
Pero el fanatismo de Los Bridgerton va más allá del cuidado y cariño con el que está hecha la serie, de la entretenida historia, las escenas de sexo, de su exquisita banda sonora o sus preciosas localizaciones. Y es que desde que saliera a la luz en Netflix, las búsquedas en Internet de corsés, blusas de encaje, mangas abullonadas o diademas se han disparado.
Pero no solo han aumentado las búsquedas de prendas de ropa similares a las de la serie. Los espectadores también se han fijado en la decoración de los palacios. En eBay han aumentado un 300% la búsqueda de plantas de glicina, un 28% el de sillas antiguas y un 16% el de zócalos. Todo ello, para dar a sus hogares una estética similar a la de los grandes palacios y jardines de la serie.
También los aros de bordado que tenían nuestras abuelas están viviendo un auge en Internet, donde han aumentado un 65% sus búsquedas gracias a la serie. Y es que tanto ha enamorado la ficción que los espectadores no dudan en viajar en el tiempo y vivir cómo Phoebe Dynevor y Regé-Jean Page en Los Bridgerton.
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