Existen muy pocos objetos que simbolicen mejor el cine clásico que los chapines de rubíes que Judy Garland utilizó al interpretar a Dorothy en la película El Mago de Oz. Son unos zapatos de culto y aunque no se sabe exactamente cuántos se fabricaron para la película, hay constancia de, al menos, cuatro pares. Uno de ellos se subasta online a través de Heritage Auctions hasta el 7 de diciembre.
Este par, además, es muy especial pues su historia incluye un robo de película y una investigación de más de una década para poder recuperarlos. Ahora de nuevo puedan ser expuestos para ser vendidos al mejor postor.
Lo que se sabe es que tras el rodaje de la película se recuperaron cuatro pares de estos zapatos. Tres de ellos fueron descubiertos por el diseñador de vestuario Kent Warner, quien fue contratado por David Weisz Co. para identificar vestuario y organizar la ahora legendaria subasta de la MGM en 1970.
En esa misma época, Warner vendió el par que ahora se subasta a Michael Shaw, junto con un sombrero de bruja de Margaret Hamilton, «La malvada bruja del oeste» que también sale a la venta en esta subasta.
Los zapatos de Judy Garland están cubiertos de lentejuelas cosidas a mano, forrados en cuero blanco, y con suelas de cuero pintadas de rojo. Los lazos están hechos de tela y fueron decorados con diamantes de imitación.
Además, estos zapatos de Judy Garland destacan porque este par es de color más oscuro que cualquier otro par conocido. Es un burdeos intenso, probablemente el resultado de un almacenamiento cuidadoso fuera de la luz directa.
Pero la gran historia de estos zapatos y que los convierten en una de las piezas más codiciadas para los fanáticos de Hollywood es su historia posterior. En agosto de 2005, unos ladrones irrumpen en el Museo Judy Garland en Grand Rapids, Minnesota, y roban los chapines. Su paradero fue un misterio durante más de una década e incluso se buscaron en las profundidades de un lago cercano al museo, pero no fueron recuperados por el FBI hasta 2018.
La importancia de estos zapatos se acrecienta aún más si se tiene en cuenta que, como señaló Associated Press a principios de este año, este par está considerado como «los de mayor calidad de todos: fueron los utilizados en primeros planos de Dorothy haciendo sonar sus tacones».
Nadie se atreve a vaticinar el precio que pueden alcanzar en la subasta, pues la propia casa de remates los considera como “el Santo Grial de los recuerdos de Hollywood”. Las pujas actuales rondan ya el millón de dólares y la subasta concluye a mediados de diciembre.
Junto a estos zapatos, se subastan también otros objetos relacionados con la película como el sombrero de la Bruja Mala del Oeste, interpretada por Margaret Hamilton, y cuyas iniciales aparecen en el ala del sombrero. Una pieza única que solo ha cambiado de manos una vez en la vida.
A los zapatos y al sombrero se unen la puerta mosquitera de la casa de Dorothy en Kansas, los guantes que Bert Lahr usó como el León Cobarde y la copia del guion de El Mago de Oz del productor Mervyn LeRoy del departamento de arte de MGM, entre otros tesoros históricos del relacionados con este clásico del cine.
Sin embargo, la subasta no se ciñe exclusivamente a objetos de esta cinta, sino que también se ponen a la venta el tablero del juego sobre el que gira todo el argumento de la película Jumanji. También un balón Wilson de Náufrago, el icónico coprotagonista de Tom Hanks en la película de Robert Zemeckis de 2000.
También el casco de motocicleta de Peter Fonda con estrellas y rayas Capitán América utilizado en la pantalla en Easy Rider. Así como la matrícula BAT-1/GOTHAM CITY del Batmovil de Adam West.
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