Álvaro Turiel

Dicen que las fragancias más importantes se encuentran en los frascos más pequeños y esta noticia es prueba de ello, una de las personas más importantes a nivel mundial como es el Papa Francisco, ha elegido una de las versiones del urbano de Fiat para sus desplazamientos. En este caso se trata de la variante “500 L”, la más grande dentro de la gama con un tamaño de 4,14 metros de largo, una anchura de 1,78 metros y una altura de 1,66 metros con un precio entre los 15.000 y los 20.000€ . Fiat 500 del año 1967 Desde su lanzamiento en el año 2007, el Fiat 500 se ha convertido en uno de los vehículos más “chic” de su segmento gracias a su diseño retro heredado del antiguo 500 del año 1967 y a su original interior. En 2012 vería la luz su hermano mayor, el 500 L, y posteriormente el 500 X, que se situarían dentro del segmento B completando así la gama del superventas italiano. El Papa Francisco a bordo del Fiat 500 L Ya es una costumbre ver al Papa en modelos convencionales como este Fiat 500 L, si echamos la vista atrás recordaremos que alguna que otra vez se ha dejado ver en un Ford Focus por la ciudad del Vaticano o en un Kia Soul en su visita a Corea del Sur el pasado año. Francisco I ha decidido utilizar este tipo de vehículos con el fin de reducir gastos, usando esporádicamente el Mercedes Clase M heredado de Benedicto XVI. El Papa Francisco utiliza muy esporádicamente el Mercedes heredado de Benedicto XVI Las imágenes han llamado la atención ya que en el continente americano siempre se han estilado los automóviles grandes y llamativos, aunque hay que mencionar que para el desfile se utilizó el todoterreno americano por excelencia: un Jeep Wrangler también producto del grupo FIAT en el típico color blanco perlado característico en los “Papamóvil”, a diferencia del azul que mostraba el Fiat 500 L.