Bruce Jenner quiere ser una mujer. Si le dejan…

Bruce Jenner quiere cambiar de sexo. Su valiente confesión puede ayudar a miles de personas. Pero no lo va a tener fácil. Porque nadie pensó que su historia acabaría siendo verdad. Sino parte del espectáculo televisivo que protagonizan las Kardashian desde hace años en Estados Unidos. Esta vez es muy diferente.

Jenner fue el héroe americano de Montreal 76. Cuando su aclamada carrera deportiva terminó, empezó la mediática, como patriarca de la familia Kardashian, padre de la modelo Kendall Jenner y protagonista del reality show que lleva casi una década en antena. Ahora a los 65 años, confiesa que ha guardado un inmenso secreto durante toda su vida. Se escondió de sí mismo durante más de seis décadas, porque no quería decepcionar a nadie. Pero siempre supo en el fondo de su alma que era una mujer. «Te ven como ese hombre macho, pero mi corazón y mi alma y todo lo que hago en la vida es parte de mí, ese lado femenino es parte de mí. Así soy», confesó Jenner hace unas semanas en el primer time de la televisión estadounidense. «A todos los efectos soy una mujer». Y se desató la tormenta.

La estrella televisiva y exmedallista olímpico confirmó lo que hace meses se veía venir. «Siempre me he sentido muy confuso con mi identidad de género. A la gente le cuesta entenderlo, pero así es mi alma», explicó Jenner a la brillante Diane Sawyer en la entrevista emitida en ABC, que batió records de audiencia y generó una marea en las redes sociales. Era la última entrevista que concedía como hombre. Ya se encuentra bajo tratamiento hormonal. Se ha sometido a varias operaciones de retoques estéticos. Y, de momento sólo en privado, se viste de mujer.

Pero es algo que llevaba haciendo años en secreto. Desde que tenía cinco años. Entonces supo por primera vez que su cuerpo no se correspondía con su alma. Se escondía en el armario de su madre para probarse sus vestidos. Y lo dejaba todo meticulosamente en orden después, para que nadie sospechara lo más mínimo. Intentó dar el paso hacia el cambio de sexo hace años. Pero le dio pánico decepcionar a los suyos. Sobre todo a sus diez hijos. Divorciado tres veces, Jenner asegura que la identidad de género nada tiene que ver con la atracción sexual.

No mintió a nadie. Pero sí ocultó su verdadera identidad durante tanto tiempo, que pensó lo haría para siempre. Hasta que decidió no hacerlo más. Porque se lo debía a sí mismo. Se merecía una oportunidad como mujer. Bruce Jenner cuenta con el apoyo total de su familia. Cuenta con el apoyo de las más importantes asociaciones de gays, lesbianas y transexuales de Estados Unidos. Cuenta con el apoyo de decenas de celebrities que lo han dejado claro con mensajes solidarios en las redes sociales, desde Lady Gaga a Ellen DeGeneres o Miley Cyrus.

E incluso recientemente el New York Times ha lanzado un paquete editorial tremendamente innovador llamado «Transgender Today». Para dar voz a los que nunca hablan de su historia y abrir el camino hacia la normalización de la diversidad y el respeto a los transexuales. «Creo firmemente que vamos a marcar una diferencia en el mundo», dijo Jenner en la entrevista que siguieron 17 millones de espectadores y rompió el récord en Twitter.

Pero es una apuesta arriesgada. Medios sensacionalistas y revistas del corazón no le dan un respiro. Apenas puede caminar por la calle sin ser atosigado por los fotógrafos. Ha intentado en varias ocasiones ir al médico a consultar futuras operaciones, pero no ha conseguido la privacidad deseada. Incluso algunas revistas han publicado portadas falsas, modificando su rostro hasta la burla para mostrar «su futuro yo». Tampoco se escapa a las crueles bromas de comediantes y humoristas. Y a todo ello hay que añadir el peligroso cóctel que supone estar en televisión constantemente, como protagonista del reality «Keeping up with the Kardashians», que prepara para este mes dos especiales sobre su transición para convertirse en una mujer.

Es difícil respetar su deseo de privacidad, si al mismo tiempo está enseñando a diario sus rincones más íntimos en televisión a cambio de una montaña de dinero. Pero Bruce Jenner sabe de sobra el riesgo que corre y está dispuesto a correrlo. Él mismo se ha puesto en este escaparate, porque está convencido de que puede cambiar las cosas para muchas personas que están pasando por lo mismo que él pasó durante décadas.

Cuando intentó suicidarse, asustado por su propia identidad y anulado, al sentirse obligado a mantenerla en secreto. Tenía que dar un paso adelante. Ahora lo ha dado. Y su familia se siente orgullosa de él. Como la comunidad gay y transgénero de Estados Unidos. Ha abierto la puerta a un cambio que puede tener un impacto crucial en este país. Y demostrar a miles de personas que no están solas. Ni lo estarán.