Miss Dior y Chanel nº 5, ¿en peligro?
Podrían ser reformulados bajo la nueva regulación de la CE para proteger a los consumidores contra las alergias.
Dos de los perfumes más famosos del mundo,Miss Dior y Chanel N º 5,se encuentran entre los perfumes que pueden necesitar ser reformulados bajo las nuevas regulaciones de la Comisión Europea destinadas a proteger a los consumidores contra las alergias.
Las nuevas normas también exigirán que los perfumes vayan perfectamente rotulados con sus ingredientes y que incluyan obligatoriamente advertencias sobre los posibles efectos secundarios, al igual que lo hace la industria farmacéutica. Según algunos medios de comunicación,ambas casas han estado trabajando en las nuevas versiones de los perfumes, aunque no han dado cifras del dinero invertido.La división de perfumería deChaneles la más rentable del mundo, con una ventas anuales que rondan los 900 millones de euros.
Pero los perfumes no son los únicos afectados. En 2013 entró en vigor la prohibición de fabricar cosméticos y productos de belleza -incluídos jabones, champú, y cremas-testados en animales. Ahora, la Comisión Europeaha puesto la atención en los productos de belleza que son contaminantes y que además pueden considerarse dañinos para el ser humano.
El 60% de los productos que nos ponemos en la piel-desde la crema hidratante, el tónico o el maquillaje- traspasan nuestra piel y cuentancon componentes químicos altamente peligrosos para la salud.Por ejemplo, el champú tiene una media de 15 elementos químicos, la sombra de ojos unos 26, el pintalabios cuenta con 33… etc. Según un estudio difundido por la cadena estadounidense FOX,una mujer tipo utiliza una media de dos kilos de este tipo de productos al año sobre su piel.
Aunque la campaña mediática a favor de los ‘productos sanos’ ha sido descalificada por parte de algunas de las grandes multinacionales del sector, lo cierto es que enEuropacada vez hay más componentes como las todoulinas en los tintes de pelo, los parabenos, conservadores cosméticos, el lauril sulfato de sodio, el triclosán, el butilhidroxianol, el polietilenglicol, los formaldehídos, la dietanolamina, etc. Muchos pueden provocar migrañas, alegias y, en algunos casos, incluso producircáncer.
Es por ello que, salvo que se decida estudiar un máster en contaminantes o se esté dispuesto a leer todas y cada una de las etiquetas con los componentes y sus derivados,lo más recomendable es buscar cosméticos orgánicos, productos naturales y con la composición más simple posible ya que no existe una cosmética 100% natural(todos los productos llevan algún tipo de conservante aunque sea ligero).
Como guía rapida, en los jaboneshabría que intentar evitarel triclosan y el triclocarbán. En las pastas de dientes el triclosán y en el champú el cetearato, polietileno, parabenos e hidantoina. En la crema hidrantante el retinol palmiato y en las lacas de uñas la formalina, el toueno, el DBP y el formaldehido.
El hecho de que en la Unión Europea se hayan prohibido la mayor parte de estos componentes está provocando un ‘éxodo masivo’ de compras hacia firmas europeasde cosmética desde Estados Unidos, un país con una conciencia cada vez más desarrollada sobre los productos medioambientalmente sostenibles y comprometidos.Una oportunidad, sin duda, para todas aquellas empresas que basan sus cosméticos en productos naturales.
En España existen compañías fabricantes de cosmética natural y ecológica bio como Natural Solter, que elaboran marcas blancas para terceros.