Atacan con huevos a Carlos III y cunde la idea de que Inglaterra desprecia a su rey

Corren malos tiempos para el rey Carlos III. Parte de su pueblo no le quiere. Algunos incluso consideran que ha comenzado mal el que dicen que será un breve reinado. Y es que algunos británicos no olvidan el sufrimiento que el hijo de Isabel II causó a la que sigue siendo la reina en sus corazones: Diana, princesa de Gales. Tampoco les agradan las malas maneras con las que ha comenzado su reinado.

El condado de York no soporta las rabietas, las maneras y el despotismo de su nuevo monarca. Por eso en una reciente visita a este ducado del norte de Inglaterra, el Rey ha sido atacado hasta con tres huevos mientras saludaba a algunos de los presentes. Ocurría este miércoles cuando un hombre, que fue detenido de inmediato, lanzaba los tres huevos que por suerte caían a los pies del rey.

El ataque con huevos al rey Carlos III se suma a otros incidentes

Acostumbrado quizá a lidiar con estas situaciones, Carlos III ni se inmutó y después de ser apartado a un lugar seguro por sus escoltas,  continuó saludando al resto de público. El joven que atacó al monarca espetó segundos antes esta frase: «Este país ha sido construido con la sangre de esclavos».

Hace unos días era su figura de cera en el Museo Madame Tussauds de Londres la que era atacada cuando un ecologista lanzaba en su rostro una tarta. Definitivamente, Carlos III y Camilla, que también acompañaba al rey en este recorrido, no son tan queridos como algunas encuestas quieren hacer creer. Inglaterra no los quiere ver en el trono que Isabel II ocupó durante más de 70 años.

No es la primera vez que el pueblo se manifiesta de esta manera cuando algo no gusta de sus monarcas. Ya en 1992 era la reina Isabel II quien recibía sendos huevazos durante una visita a Alemania. Aunque en aquella ocasión, la Reina ni siquiera se enteró. El pueblo es soberano. Es quien tiene la última palabra, aunque tal vez lanzar huevos no sea la manera mas civilizada. ¡Dios salve al Rey! Porque, de momento, el pueblo no parecer estar por la labor.