El secreto ha tardado varias semanas en desvelarse. Las medidas de confinamiento por culpa del coronavirus han jugado a favor de la intimidad de la pareja, pero estaba claro que más pronto que tarde, el refugio de Harry y Meghan Markle en Los Ángeles iba a salir a la luz. El Daily Mirror lleva a la portada en su edición de hoy los detalles de la vivienda en la que ambos permanecen confinados desde finales de marzo. Su extensa red de influyentes amigos también les ha ayudado en este asunto.
Cuenta la publicación británica que la pareja reside desde su llegada a la ciudad californiana en una de las más exclusivas viviendas de la región. Una mansión cercana a Beverly Hills, propiedad de Tyler Perry, actor, cantante, productor y guionista de cine y televisión muy reconocido en la industria del entretenimiento. Perry forjó su fortuna (que se estima en unos 600 millones de dólares) durante la primera década del siglo XXI. Su trabajo, creatividad e intuición le llevaron a ingresar hasta 130 millones de dólares en 2011; el mejor pagado del sector ese año.
Amigo personal de Oprah Winfrey, no tuvo dudas en ceder una de sus propiedades a Harry y Meghan Markle cuando la empresaria acudió a él para comentar las necesidades de alojamiento de los duques. Ambos no dudaron en mudarse a una casa que reúne ampliamente todos los requisitos que necesita la pareja, su hijo Archie, la madre de la actriz y el séquito de seguridad y servicio que les acompaña.
Cuenta el medio británico que en el mercado el precio de la vivienda rondaría los 18 millones de dólares. Se trata de una mansión de estilo toscano con dos alturas. Un patio central en el que hay una pequeña fuente da acceso a la residencia que se divide en dos alas casi simétricas. Entre vivienda y perímetro exterior la propiedad ronda los 89.000 metros cuadrados.
La casa se encuentra al final de una de las calles privadas del exclusivo barrio de Beverly Ridge Estates. No es posible acercarse a ella sin atravesar una barrera vigilada las 24 horas por personal de seguridad medio kilómetro antes. Además, la finca en la que se encuentra se extiende a lo largo de la colina y posee un amplio recinto para pasear y disfrutar de la naturaleza. Privacidad máxima a prueba de fotógrafos y miradas indiscretas.
Como era de esperar dadas las dimensiones del complejo, la distribución interior es digna de un resort de lujo. Al menos ocho dormitorios, doce cuartos de baño y múltiples estancias llenas de atractivo. En la parte trasera, una enorme piscina dentro de un coqueto jardín con vistas a la ciudad. La información revela que la casa no ha sido vendida. Pero se desconoce por el momento si la pareja está en la residencia de alquiler o como invitados de Tyler Perry.
*Foto principal: Gtres
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