Un año más la reina Sofia celebra su cumpleaños. Son ya 85 años de una vida dedicada en pleno a la Corona. Desde 1975, el año en que fue proclamada reina Consorte de España, doña Sofia ha cumplido con trabajo, esfuerzo, sacrificios personales y entereza su papel. Primero como Reina y ahora como Emérita, aunque me dicen que no le agrada que la llamen así.
La historia oficial de la reina Sofia comienza para los españoles el día que contrae matrimonio con el entonces príncipe Juan Carlos. A partir de ese momento, ella se trasladaba desde su Grecia natal al que sería su país, España.
Poco se ha dicho, y menos agradecido, del gran papel que jugo la reina Sofía en los primeros años de matrimonio, y su ayuda inconmensurable para que su marido llegara al trono español. En estos años, la Reina ha cumplido con sus obligaciones de manera impecable. “Es una gran profesional”, dijo el rey Juan Carlos I en una ocasión. Y razón no le faltaba.
En estos últimos 50 años no ha tenido una falta. Pocas amigas conocen sus pensamientos, tan solo Irene, su hermana y fiel escudera que la ha acompañado desde el principio. En estos años, la reina Sofía ha sufrido grandes pérdidas. Primero la repentina muerte de su madre, la reina Federica en 1982. Antes, la de su padre en 1964, después de una operación de menor importancia.
Luego, en enero de este año, su hermano Constantino. Ahora solo le queda Irene. Y es que doña Sofía sabe que su posición le “impide” tener muchas amigas y mucho menos confidentes. Forma parte de los sacrificios que hay que hacer cuando eres la Reina.
Su trabajo desde 2014, fecha en la que su hijo, con el que tiene una gran conexión, se convirtió en Felipe VI, se ha centrado en sus obras beneficias y en representar a la Corona en algún acto que le sea encomendado por la Casa.
Siempre con entereza, profesionalidad y, sobre todo, con una sonrisa. Esa sonrisa tan particular que tiene y que la hace muy cercana al pueblo. La reina Sofía es hoy por hoy, con el permiso de su nieta, la Princesa de Asturias, el miembro mas querido y respetado de la Casa Real.
Pocas veces se ha permitido una expresión diferente en su rostro que no sea una sonrisa. Lo aprendió desde la cuna. Pero en tres ocasiones no ha podido reprimirse, gracias Dios; porque nos encanta ver esa faceta y ha llorado en publico. La primera vez en 1993 en el funeral de Don Juan de Borbón, Conde de Barcelona y padre del rey Juan Carlos.
Luego en 2011 durante los atentados y durante una misa con familiares. La ultima vez, hace unos días cuando en un acto donde ella otorgaba a Emilio Lora-Tamayo el rectorado vitalicio de la Universidad Camilo José Cela.
Hija de Reyes, esposa de un Rey, madre de Rey y, sobre todo, abuela de una futura Reina. Son 85 años de vida de Sofía, una princesa helena que se convirtió en reina de España durante 39 años y que hoy por hoy sigue representándonos en todo el mundo. Con una sonrisa. Gracias majestad. ¡Larga vida a la reina Sofía!
Evidentemente, la ciudad de los rascacielos, Dubái, tiene el derecho y la obligación de generar… Leer más
Para conseguir el efecto de buena cara sin maquillaje la clave está en tener una… Leer más
En esta época del año es habitual obsequiar a los que más queremos con algún… Leer más
Son muchas las bondades que ofrece el nuevo Estadio Santiago Bernabéu. Y no hablamos solo… Leer más
Era la primera vez que Christie's ofrecía tres dinosaurios en subasta. Finalmente sus Iconos del Jurásico… Leer más
El reloj de bolsillo vuelve a casa. Este es el resumen de una historia que… Leer más