El Mundo de Zurab Tsereteli
Le conocí en el dentista y terminamos en su estudio de Nueva York, donde me explicó su obra.
En Nueva York puede pasarte cualquier cosa. Literal. Llegué un martes por la mañana al dentista, el extraordinario Dc. Osipow que, además de amigo es una fuente sin límites de sabiduría, historia y política americana. He de reconocer que hasta que caí en manos de Osipowel dentista implicaba varios días de concienciación y meditación sobre la visita. Con Osipow el miedo se ha transformado en aventura. Nunca sabes a quién te puedes encontrar en su consulta, desde un jugador de los Jankees, un director como Speeke Lee o uno de los escultores más importantes de Rusia.
Y este es el caso, Zurab Tsereteli acaba de cumplir 82 años y es artista más importante contemporáneo de Rusia, además del Presidente de la Academia Rusa de las Artes. Su nieto mayor se casó con una joven mallorquina y, desde entonces, su amor por España y en especial por Marbella ha sido incondicional. Allí, en el paseo de Banús se levanta la estatua a Cristobal Colón, el hombre de bronce que tendrá su ‘contraparte’ en Puerto Rico. En marzo,sus majestades los Reyes de España inaugurarán la estatua a Cristobal Colón como descubridor del nuevo mundo realizada en la fundición de San Petersburgo.
«Para mí es como cerrar el círculo», apunta el pintor y escultor. «Todo empezó en España y ahora inauguramos la escultura majestuosa en San Juan de Puerto Rico, allí donde Cristobal Colón llegó uniendo para siempre los dos continentes», concluye.
En su casa-estudio de Nueva York,Tsereteli acumula cuadros de exposiciones anteriores y obra nueva.«Depende del día soy capaz de pintar un cuadro en unas horas o dos… todo es cuestión de inspiración». Ahora está pintando una colección inspirada en el circo y sus personajes – quizá por influencia de los nietos, aunque es mundialmente reconocido por los cuadros de flores multicolorque dan ganas de tocar: «Las flores no sólo representan la belleza, también son la máxima expresión del color y representan muy bien la vida». Flores y fotos de la familia y de los amigos como por supuesto Putin, Hillary y Bill Clinton, De Blasio(el alcalde de Nueva York)… Le pregunto por las elecciones presidenciales y responde que «Hillary es una gran persona».
Tsereteli no tiene agente,sus nietos mayores son los encargados de coordinar su agenda, sus exposiciones y la venta de cuadros – aunque muchos de ellos son para los amigos-. La factoría para su obra escultórica está en San Petersburgo donde diseña y materializa sus obras gigantescas (la Cristóbal Colón de Puerto Rico pesa varias toneladas y llega por barco en varios viajes a la isla caribeña).
Como buen ruso,Tsereteli recibe en su casa con vodka (que además adelgaza, según el Doctor Osipov). Su teléfono, un Vertu de oro de 24 quilates, no deja de sonar. Yo nunca había visto un Vertu, esos teléfonos con concierge que cuestan lo que parecen, que están numerados y cuya tecnología – antes Nokia y ahora británica- dicen que es imposible de desencriptar (como Apple pero antes de Apple).
Tsereteli dice tener intacta su ilusión por la vida, por la pintura, por la creación artística y por la familia. «La familia es lo que mueve el mundo. Yo ya soy mayor – me dice– he vivido de todo, el comunismo, la Perestroika, la llegada de la democracia, sus bondades y sus problemas… al final la historia siempre se repite».