Es el dueño de una ironía propia de los grandes maestros de ese género. Y me encanta porque me hace reír y, sobre todo, consigue que mi admiración se convierta en sana envidia. Le apasiona el cine tanto como a mí, pero me gana muchas veces en memoria. Ricardo Altable es el “rey” de las madrugadoras mañanas de Telemadrid (Buenos Días Madrid), pero su proyección me da a mí que no tiene fin…
The Luxonomist: ¿A quien madruga Dios le ayuda?
Ricardo Altable: Esa es una bonita frase que se inventaron los privilegiados que no tenían que madrugar y siempre amanecían a partir de las 12. (risas) La verdad es que madrugar tanto es duro, pero aprendes a aprovechar mucho el día, te da tiempo a hacer de todo, o casi de todo.
TL: ¿Cómo se gestiona la vida cuando la vives casi al revés que todo el mundo?
RA: Madrugar y tener tiempo disponible a partir del mediodía, me permite estar con los míos, visitar frecuentemente a mi madre, hacer deporte, recoger a los peques del cole… Esas cosas antes eran impensables.
TL: ¿Qué título de película tendría esa vida?
RA: Centrándonos solo en los madrugones, “¡Jo, qué noche!”, por aquello de que ni siquiera ha salido el sol cuando te pones en marcha. Y si atiendo al nombre de mi programa, “Good morning Vietnam”, pero mucho más cerca, aquí en Madrid.
TL: ¿Qué te da la comunicación que no encuentras en ninguna otra actividad de la vida?
RA: Soy un privilegiado por hacer lo que me gusta, lo que me llena y me apasiona. Trabajar en este mundo me ha permitido desarrollar no solo mi faceta periodística sino también la personal. Me siento un afortunado, no todo el mundo puede decir lo mismo.
TL: ¿Cómo es el Ricardo profesor de universidad?
RA: Cercano, comprensivo y muy centrado en la docencia desde un punto de vista profesional. Siempre que imparto clase lo hago dándole un enfoque centrado en sus futuros como periodistas, nunca he sido muy académico.
«Metería en una máquina del tiempo a los grandes como Platón»
TL: ¿Se puede ser imparcial cuando los sentimientos entran en juego?
RA: No, y tampoco lo busco. Puede que me equivoque y no sea un ejemplo de periodista de manual, pero siempre me implico en las historias que me tocan la fibra. Para mí es imposible ser imparcial cuando informo sobre una injusticia, un desahucio, una violación, un ataque homófobo o racista.
TL: ¿La forma más elegante de decir adiós?
RA: Dejando siempre un buen sabor de boca. Como el buen vino o el buen café.
TL: ¿En qué situación has dicho “chapeau”, me quito el sombrero?
RA: Cuando alguien ha luchado por defender sus principios contra viento y marea. Sobre todo si el débil se ha plantado frente al poderoso.
TL: ¿Qué le gusta hacer a Ricardo Altable a su manera?
RA: Televisión. Intento ser lo más cercano y natural posible. Huyo de la impostura. También lo intento en mi vida, pero ahí puede que no siempre lo consiga.
TL: ¿Qué es lo que mejor se te da hacer?
RA: ¿Esto lo van a leer menores de edad? (risas) No, en serio, eso me gustaría que lo dijesen los que me rodean. Creo que soy un buen hijo, mi madre no me hará quedar mal por decirlo (risas).
«Soy un profesor de universidad cercano y comprensivo»
TL: Si pudieras ser otra persona o cosa… ¿por qué /quién optarías?
RA: ¿Puedo elegir a Paul Newman cuando tenía 25 años? No lo sé, estoy satisfecho con quien soy, pero imagino que me gustaría ser alguien que dejase su pequeño legado en la historia, aunque fuese un legado muy chiquitito, un legadín.
TL: ¿Qué ha sido lo que realmente ha marcado tu vida?
RA: Mis orígenes, eso lo tengo claro. Soy quien soy precisamente porque recuerdo cada día de dónde vengo. Por muy bien que te vayan las cosas, nunca puedes olvidar a tu gente, que son por los que has llegado hasta aquí.
TL: ¿Qué pone en tu estado de WhatsApp?
RA: No lo sé. Creo que lo que pone por defecto, nunca lo cambio.
TL: ¿A quién meterías en una máquina del tiempo?
RA: Si pudiese, aunque pueda parecer pedante, a los grandes genios de la historia de la humanidad. Platón, Sócrates, Aristóteles, Da Vinci… y también a mis seres queridos, los que ya no están.
TL: ¿Qué locura has hecho para conocer a uno de tus iconos?
RA: Mi profesión me ha hecho conocer a muchos de ellos, pero por suerte no me he visto en la necesidad de hacer ninguna. Nunca he sido especialmente mitómano, ni siquiera con Charlize Theron (risas).
«No veo series pero sí muchas películas»
TL: ¿A qué eres inmune?
RA: Pues creo que a nada, todo termina afectando. Ojalá pudiese decir que no es así, pero no puedo.
TL: ¿El insulto hace callo?
RA: El insulto hace callo, pero también el halago. Creo que hay que huir tanto de unos como de otros. Como dicen los modernos, «huir tanto de los haters como de los followers”.
TL: ¿Marca España es…?
RA: Por suerte, muchísimas cosas. Nuestro clima, nuestra gastronomía, nuestro cine y también nuestro deporte. Tíos como Nadal, Casillas, Gasol y compañía nos han hecho más grandes… Los españoles tenemos que liberarnos de muchos complejos.
TL: ¿Qué no falta nunca en tu maleta?
RA: Libros y películas. Cuando estoy de vacaciones devoro cine y literatura. Pero no series, sino películas. Soy un clásico.
TL: ¿La suerte es más definitoria que el talento?
RA: La suerte te permite llegar o triunfar en un momento muy determinado, pero si no hay talento, con el tiempo todo se acaba.
«El abuso de poder me hace perder la templanza»
TL: ¿A qué le suena la vida a Ricardo Altable?
RA: Tengo mis momentos y bandas sonoras para cada ocasión. Si tuviese que elegir solo una, en este momento sería ‘La la Land‘, vale para cuando estás triste o de subidón.
TL: ¿La belleza da poder?
RA: El poder es el que muchas veces da la belleza, aunque sea una belleza ficticia o irreal. Soy bastante defensor de la erótica del poder. La belleza bien utilizada lo que da son oportunidades, te abre algunas puertas.
TL: ¿El dolor más intenso?
RA: Perder lo que más quieres.
TL: ¿Ser elegante es…?
RA: Ser tú mismo. La elegancia es una actitud ante la vida, se tiene o no se tiene. Por eso digo que si eres tú mismo y la tienes, bienvenida sea.
TL: ¿Qué le hace perder la templanza a Ricardo Altable?
RA: Cualquier injusticia, principalmente si hay abuso de poder. Y en ocasiones, también el Real Madrid (risas).
«La banda sonora de ahora mismo sería ‘La La Land'»
TL: ¿Con quién compartirías la cena de tus sueños?
RA: Pues rodeado de mi gente, con la familia y los amigos y, a ser posible, con Ferrán Adrià, Berasategui y los hermanos Roca en la cocina… Y también con los de Masterchef sirviendo los platos y echándonos unas risas. Regado todo con buen vino.
TL: ¿Esa crítica que, por ser verdad, más te ha dolido?
RA: Siempre intento aprender de ellas y también de los errores. Ha habido muchas que han dolido, pero este mundillo no nos permite parar a lamentarnos por lo que pudo haber sido y no fue.
TL: ¿La pregunta que no te he hecho y te habría gustado?
RA: Esa la dejo en el aire, por si hay una segunda entrevista. Piensa un poco en ella para la próxima vez.
*Fotografía principal Gtres.
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