Roi Méndez: “Operación Triunfo me pilló sin saber lo que quería hacer”

Tras su participación en OT (2017) Roi Méndez ha seguido haciendo música. Ahora presenta su último tema, ‘La misma dirección’. Un trabajo muy esperado por sus fans en el que comparte colaboración con su amigo y compañero en la televisiva academia, Luis Cepeda. Hemos charlado con él sobre sus proyectos musicales, su nueva faceta en la interpretación y muchas otras cosas.

The Luxonomist: ¿Qué has estado haciendo en la pandemia?
Roi Méndez: A parte de despejarme y cultivar la cabeza, estoy haciendo cosas para las que pensaba que no tenía tiempo. Como ponerme con el ordenador, aprender a producir cosas, etc.

The Luxonomist: ¿Cómo comenzó tu afición a la música? ¿Quiénes eran tu referencia?
RM: Empecé a tocar por un grupo que me gustaba mucho cuando era adolescente, se llamaba ‘McFly’. Era una banda británica de boyband, con un estilo pop que me obsesionaba. Luego empecé a escuchar ‘The Beatles’ y creo que mi referencia es una mezcla de ambas.

TL: ¿En qué estilo musical piensas que nunca te veremos?
RM: Yo creo que en flamenco, por ejemplo. No por mí sino porque me parece difícil y pienso que hay que nacer para ese arte.

Su último trabajo con Cepeda

TL: Traes tu nuevo tema ‘La Misma Dirección’ junto Cepeda. ¿Cómo surgió este single?
RM: Es una colaboración de dos amigos que nace sin ningún tipo de pretensión estratégica. Nace de nuestra relación. Yo le enseño la canción, le gusta, la quiere para él ¡y yo encantado! No suelo preguntarles a mis amigos si quieren mis canciones porque siento que los pongo en un compromiso. Esta canción ya tiene un año, porque la tenía hecha antes de la pandemia, incluso la estuve tocando en mi gira madurándola en los conciertos, pero Cepeda se unió luego.

TL: ¿Cómo fue la grabación de este vídeo? Cuéntanos anécdotas que hayan vivido en él…
RM: Lo grabamos hace un par de meses. No logramos hacerlo antes porque era complicado. La canción la grabamos a distancia las voces, pero esperamos hasta ahora para hacer el vídeo. Es un regalo que nos quisimos hacer el uno al otro y también un detalle para la gente que nos conoció a la vez. Como anécdotas recuerdo cuando le puse la canción a Luis (Cepeda) a los 10 segundos se quitó los cascos enfadado y yo le dije: “¿Tío, por qué?” Y me dijo: “Porque me gusta como suena” (risas). Con Luis siempre hay muchas anécdotas, también querían que en vez de abrazarnos acabáramos peleando al final del vídeo, y quería ganar él por lo que discutimos un poco de broma ahí.

El intenso paso de Roi Méndez por Operación Triunfo

TL: Sois la segunda edición más popular de OT. Coméntame algo positivo y negativo de haber sido concursante.
RM: Lo positivo, tener un punto de partida privilegiado para empezar a desarrollar una carrera. Partes de un punto interesante luego puedes usarlo mejor o peor. Lo malo es que ese punto de partida te puede pillar un poco pez para afrontarlo. A mí me pilló sin saber lo que quería hacer, no lo tenía tan claro. De hecho estoy en continuo proceso de saberlo. Pero claro, ahora me noto más preparado, entiendo cómo funciona todo. Ahora intento preocuparme por las cosas que están en mis manos. Otro aspecto negativo es el impacto a nivel psicológico, tanto la subida como la bajada de la fama.

TL: ¿Qué consejo nos das para no frustrarnos y seguir con nuestros sueños?
RM: Ni yo aún lo he cumplido (risas). Pero una frase que me aplico es tirar siempre para adelante, dejar el ruido fuera y centrarte en lo tuyo. Así, poco a poco, vas a cumplir tus objetivos. Estos pueden tardar más de lo que esperas, pero siempre he tenido una sensación de avance y no siento que haya remado  a contracorriente.

TL: Proyectos personales y profesionales de cara al verano…
RM: La faceta personal es seguir aprendiendo, trabajando, cultivando la sabiduría interna. Y profesionalmente, seguir componiendo, grabando las próximas canciones. A parte estoy actuando en un par de series, actualmente estoy con ‘Luimelia’ y es una experiencia nueva y divertida. Me gusta la sensación porque no me siento presionado. En la música a veces me siento así porque se supone que es lo que debo hacer bien. En la interpretación es distinto, porque la gente no espera tanto y eso me da margen para relajarme. Por eso quizás siento que es más fácil sorprender.