Un gurú de la moda en la televisión

Puede presumir de haber entrevistado a los grandes maestros de la costura y a las tops más importantes del momento. Nacido en Tudela, Navarra, Jesús María Montes-Fernández no ha faltado a su cita con las pasarelas más relevantes del calendario internacional coincidiendo con otros gurús de la moda.

Fue pionero en introducir este universo en la pequeña pantalla cuando ningún medio generalista se hacía eco de una de las industrias que más riqueza y puestos de trabajo genera en España. Para el experto, «la moda es cultura e industria, un compendio de muchas cosas que se resumen en una ilusión por sentirse bien y agradar a los demás». Hablamos con él sobre su trayectoria en el mundo de la costura.

The Luxonomist: Un desfile que te haya dejado sin palabras
Jesús María Montes-Fernández: A lo largo de estos años he tenido el privilegio de asistir a auténticos espectáculos, imborrables en mi memoria: desde el debut de John Galliano en el 97 en la Opera Garnier, a la despedida de Kenzo Takada en el Circo del Invierno o algunos de los desfiles de alta costura de Thierry Mugler con Jerry Hall de estrella. 

TL: ¿Cuál ha sido la entrevista más interesante que has hecho?
JMMF: En cuanto a entrevistas interesantes, te diré que en los 90 entrevisté a todas las top models famosas que nacieron a la sombra de Gianni Versace: eran mujeres personaje, diosas, empresas potentísimas de sí mismas y
muchas de ellas, además de muy bellas, muy interesantes.

TL: Entre los diseñadores actuales, ¿quiénes merecen tu mayor reconocimiento?
JMMF: Si hablamos de España, Josep Font es ahora mismo el mejor en cuanto a calidad de sus trabajos. A la casa Delpozo le ha dado una vitalidad que no tenía. Por su capacidad de trabajo e implicación destaco a dos «hardworkers» natos: Custo Barcelona y Agatha Ruiz de la Prada.

TL: Entre sus amigos están el desaparecido Óscar de la Renta ¿cómo surgió esa amistad?
JMMF: En una entrevista que le hice en su mansión de Conneticut en 1997 a raíz del lanzamiento de su perfume ‘So’ de Óscar de la Renta y cuya imagen era Eugenia Silva. Posteriormente, Nati Abascal me hizo de cicerone y le dijo a Óscar que yo era uno de los pocos periodistas de España en el que ella confiaba y que él hiciera lo mismo. A partir de entonces, mantuvimos una relación y un trato que fue creciendo con los años, hasta convertirse en admiración hacia él. Era un gran profesional pero más aún, mejor persona. Un ser humano lleno de valores. Él representaba una moda refinada, aristocrática, para una mujer jet-set.

TL: Con Carolina Herrera ¿también hay amistad más allá de la admiración profesional?
JMMF: Con ella existe una gran admiración por todo lo que ha conseguido. Hay que tener en cuenta que ella empezó tarde en la moda, a partir de los 40 años. Todos la conocen como la dama de la moda, es muy lista y muy inquieta. Nos apreciamos mutuamente y hay un cariño latente por todo el apoyo que le he dado en este cuarto de siglo. 

TL: ¿El maestro de alta costura por excelencia?
JMMF: Para mí ha habido dos: Yves Saint Laurent y Christian Lacroix, lo que se dice dos costureros con mayúsculas. Uno era el rigor, YSL y el otro la exacerbación de la feminidad.

TL: ¿Cómo ha evolucionado la industria textil desde sus inicios?
JMMF: Antes no se entendía o se veía lejana, como para una élite. En la actualidad, los diseñadores sugieren una serie de ideas, llamadas propuestas o tendencias en el argot de la profesión, pero antes imponían sus criterios. Hoy en día la moda está en la calle y forma una horquilla muy amplia para todo tipo de gustos y necesidades.