El divorcio de Jennifer Lopez y Ben Affleck será tormentoso

El divorcio de Jennifer Lopez y Ben Affleck tiene aristas económicas que resolver porque la pareja no tenía acuerdo prenupcial alguno.

Iván Perlado. 04/09/2024
Foto: Gtres.

La separación de Jennifer Lopez y Ben Affleck pinta mal. Así al menos es lo que cuentan fuentes cercanas a la pareja y que estarían al tanto de los pormenores legales que afectan al divorcio. Unas declaraciones que ha recogido el portal Page Six y en las que se filtra que la pareja no tendría acuerdo prenupcial alguno. Aunque llevaban varios meses dando síntomas de crisis, no fue hasta el pasado 20 de agosto cuando la actriz y cantante solicitó el divorcio en un juzgado.

Tras dos años de matrimonio, en una segunda oportunidad para la pareja que parecía la definitiva en sus vidas, Jennifer Lopez y Ben Affleck oficializaban así una ruptura que promete emociones fuertes. Eso es al menos lo que parece.

Jennifer Lopez y Ben Affleck
Foto: Gtres

Jennifer Lopez y Ben Affleck tienen asuntos económicos que resolver

Ambos estarían ahora dentro de un periodo de mediación que dirige al parecer Laura Wasser, una reconocida experta en el divorcio de celebridades. Sin embargo y, según cuenta el citado medio, «hay algunos puntos conflictivos sobre las finanzas». Entre otras cosas porque al no existir acuerdo prenupcial, cualquier ingreso o propiedad atesorada por la pareja durante su matrimonio se considera propiedad común.

Según la legislación local, ambos cónyuges serían responsables y/o propietarios de deudas o ingresos durante el tiempo que estuvieron casados, independientemente de quién los obtuvo. Aunque sólo han sido dos años, estaríamos hablando de importantes cantidades de dinero.

Jennifer Lopez protagonizó y produjo varias películas. Y lanzó Delola, su marca de spritzs artesanales, lo que habría elevado su patrimonio neto a unos 400 millones de dólares. Por su parte, los diferentes trabajos de Ben Affleck en este periodo habrían incrementado su patrimonio en unos 150 millones de dólares. Ambos compraron también la lujosa mansión de Beverly Hills que ahora está a la vena por 68 millones de dólares.

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