Isabel Preysler: «Los hijos de Enrique son perfectos»

Espectacular, como siempre, Isabel Preysler acaparaba ayer todas las miradas en el desfile que Pedro del Hierro ofreció en el Museo del Ferrocarril de Madrid. Su relación con el modisto es muy especial y así lo confirmó a la prensa, a la que dedicó unos minutos para contestar sin tapujos a temas tan controvertidos como la reciente demanda por paternidad interpuesta a su ex marido, Julio Iglesias; el nacimiento en secreto de los niños de su hijo Enrique y Anna Kournikova; o la herencia de su difunto esposo Miguel Boyer.  

«Estoy muy bien, gracias. He tenido un mes de diciembre con grandes regalos«, contestaba al ser preguntada por su actual estado y refiriéndose a la boda de su hija menor con el tenista Fernando Verdasco y al nacimiento de sus dos nuevos nietos. Con orgullo de abuela explicaba que «son unos niños perfectos« y que tanto ella como Mario Vargas Llosa -que volaron respectivamente desde Madrid y Montevideo para conocerlos- pasaron «mañana, tarde y noche con ellos» durante unos días en casa de Enrique y Anna.

Ante la duda sobre la posibilidad de una gestación subrogada por parte de la ex tenista y la dificultad de haber mantenido el embarazo en secreto, se mostró tajante: «El tema de la gestación subrogada es absurdo, la gente no sabe qué inventar. Han podido llevarlo de una forma muy discreta porque cuando Enrique no está trabajando, hace una vida muy tranquila y muy casera. Además, Anna ha tenido muy buen embarazo».  En este sentido dijo que «Enrique será muy buen padre« y que la decisión de haber subido las fotos de sus hijos a las redes sociales tras tanto hermetismo ha respondido a que «había un interés muy grande en torno al tema y lo han abordado así porque estaban muy acosados«.

Isabel está feliz con sus nuevos nietos y también con la reciente boda de su hija Ana Boyer con Fernando Verdasco: «No me puedo quejar del momento que estoy viviendo. Se ha casado mi hija con el chico del que está enamorada y al que además de ser estupendo, queremos muchísimo». Respecto a este tema, negó rotundamente que hubiera algún tipo de enemistad con la familia de Fernando y añadió que tanto ella como Mario y todos sus hijos se llevan «fenomenalmente bien» con los padres y hermanas de su yerno y que «podría decir hasta que nos queremos».

Dice que no ha notado ningún cambio en Ana desde que se ha casado «excepto que la veo mucho más feliz» y que cree que la pareja esperará un poco para tener hijos «porque llevan un ritmo de vida muy agitado, viajando sin parar».

Sin parar y viento en popa va su relación con el Premio Nobel, Mario Vargas Llosa, con el que cumplirá en breve su tercer aniversario. Reconoció que aún no le ha regalado nada y bromeando sobre el tema de su futuro enlace dijo «también se lo puedo pedir yo, ¿por qué no?. Con que 2018 sea igual que 2017 yo reconozco que seguiré siendo muy afortunada».

Así, contestó también a temas más controvertidos como la herencia de Miguel Boyer: «Tanto Ana como hemos hecho todo lo que nos han pedido sobre el tema. No se ha hecho aún porque por el otro lado no han querido cumplir. Me imagino que no están conformes con muchas cosas, pero no sé con qué, porque Ana y yo les hemos dado todas las facilidades. Teníamos una relación cordial».

Otro tema difícil es la reciente demanda de paternidad sobre su ex marido, Julio Iglesias: «Me cuesta trabajo creerlo, pero si sale, será. En ese caso estoy segura de que Julio cumplirá porque siempre ha sido una persona muy responsable».

Además de dar las gracias a la prensa por mantener con ella siempre una relación de respeto y cordialidad, posó para los medios con un dos piezas de Pedro del Hierro en terciopelo azul intenso, zapatos con aplicaciones doradas y espectaculares joyas de Rabat. En concreto, lució un collar de oro blanco con eslabones de brillantes, un anillo de platino con diamantes y un anillo de oro blanco también con diamantes.