Luis Zahera: «Ser elegante está relacionado con tener una personalidad extraordinaria»
Me he dado cuenta, después de hacerle este cuestionario a Luis Zahera, que nos unen más cosas que la pasión por nuestra tierra. Hay otra más profunda e intensa, la que sentimos por nuestras madres, que ya nos protegen desde donde estén. Reconoce perder la templanza con frecuencia porque tiene mal humor ¡quién lo diría!, pero yo añado que hay que ser indulgente con ese “detalle” porque su talento compensa cualquier salida de todo, hecha desde el respeto. Le vemos en la comedia romántica Loco por ella y la serie Sky rojo, rueda Entrevías y ya es, desde hace tiempo, un imprescindible de nuestra ficción…
The Luxonomist: ¿Qué te da la interpretación que no encuentras en otra actividad de la vida?
Luis Zahera: Volver a ser un niño. Imagínate que tu trabajo es jugar, te da divertimento, es una profesión maravillosa.
TL: ¿Cuándo te das cuenta de que este oficio es lo tuyo?
Luis Zahera: El 12 de febrero de 1982. Mi hermana Ángeles me llevó a ver Angélica en el umbral del cielo de Eduardo Blanco Amor. Me quedé flipado de ver aquello, la primera vez, 16 años.
TL: «No te puedo confirmar ni desmentir” ¿Estaba en guion o es cosecha propia?
Luis Zahera: Estaba en guion, pero muchísimas otras frases no (risas).
TL: ¿Has hecho locuras por amor?
Luis Zahera: Sí, el que no las hizo es que no conoció el amor.
“No conozco el insulto, pero supongo que sí hace callo”
TL: ¿Cómo ha sido la travesía desde “Mareas vivas” al lugar de hoy?
LZ: Muy agradable, me considero un privilegiado que tuvo mucha suerte, porque el problema de este trabajo es mantenerse y no desaparecer.
TL: ¿El salto a la ficción nacional era un objetivo, un sueño o la lógica recompensa?
LZ: Yo creo que esto es estar en el sitio adecuado en el momento justo. Primero solo había dos cadenas, luego las autonómicas y ahora hay plataformas como Netflix, que están en 190 países, la revolución. Yo cogí la ola, y hay mucha gente que pasa mucho tiempo esperando y esa ola no llega.
TL: De gallega a gallego… ¿Galicia Calidade?
LZ: Galicia oficio, mucho oficio, muchas horas de vuelo. La calidad y la excelencia eso ya es más complicado.
TL: ¿Se puede ser imparcial cuando los sentimientos entran en juego?
LZ: Se puede ser imparcial en todo lamentablemente, pero hay que implicarse…
TL: ¿La forma más elegante de decir adiós?
LZ: Un beso en los labios (con o sin mascarilla, según).
TL: ¿En qué situación has dicho “chapeau”, me quito el sombrero?
LZ: Con estas preguntas.
“Es triste que la suerte sea más definitoria que el talento”
TL: ¿Qué te gusta hacer a tu manera?
LZ: Casi todo lo hago a mi manera. Comulgo con la frase de Saramago: el caos es un orden por descifrar.
TL: ¿Qué es lo que mejor se te da hacer?
LZ: El tonto. Como decía mi madre.
TL: Si pudieras ser otra persona o cosa… ¿por qué /quién optarías?
LZ: Por ser una cosa, una piedra bonita.
TL: ¿Qué ha sido lo que realmente ha marcado tu vida?
LZ: Mi mamá.
TL: ¿Qué pone en tu estado de WhatsApp?
LZ: Soltero.
TL: ¿A quién meterías en una máquina del tiempo?
LZ: A mí… para traer de vuelta a mi mamá.
TL: ¿Qué locura has hecho para conocer a uno de tus iconos?
LZ: Ninguna, lamentablemente no soy nada fetichista.
«La vida me suena a ‘Entre dos aguas’ de Paco de Lucía»
TL: ¿A qué eres inmune?
LZ: A lo que piensen sobre mí.
TL: ¿El insulto hace callo?
LZ: En mi caso no lo conozco porque a los actores siempre nos elogian, pero sí, supongo que el insulto hace callo.
TL: ¿Marca España es….?
LZ: Es todo menos Portugal.
TL: ¿Qué no falta nunca en tu maleta?
LZ: Atún Atunlo.
TL: ¿La suerte es más definitoria que el talento?
LZ: Sí, es así de triste.
TL: ¿A qué te suena la vida?
LZ: A Entre dos aguas de Paco de Lucía.
“Como decía mi madre, lo mejor que se me da hacer es el tonto”
TL: ¿La belleza da poder?
LZ: Ojalá se lo diera a las mujeres.
TL: ¿El dolor más intenso?
LZ: El de muelas.
TL: ¿Ser elegante es…?
LZ: Está muy relacionado con las personalidades extraordinarias.
TL: ¿Qué te hace perder la templanza?
LZ: Casi todo, tengo muy mal humor.
TL: ¿Con quién compartirías la cena de tus sueños?
LZ: Con mi mamá.
TL: ¿Esa crítica que, por ser verdad, más te ha dolido?
LZ: Por muy negativa que sea, si es verdad, se aprende de ella.
TL: ¿La pregunta que no te he hecho y te habría gustado?
LZ: ¿Falta mucho para acabar?