Madonna modera el debate en Instagram medio desnuda

Los fans de Madonna e incluso los que no son seguidores de la cantante siguen atónitos tras el despliegue fotográfico de la cantante en su cuenta de Instagram. Algunos se preguntan incluso si le han podido hackear la cuenta, al ver sorprendidos la serie de fotografías de alto contenido erótico que ha publicado. Otros en cambio se han mostrado encantados al ver cómo la cantante, que cumplió el pasado agosto 63 años, luce una figura espléndida que ya quisieran muchas jóvenes.

«¿Qué hacemos con Madonna?», deben preguntarse en los cuarteles Instagram en Menlo Park, California. Veremos si la red social no acaba por eliminar unas estampas que bordean lo impropio dentro de su política de contenidos. Madonna no ha dudado en publicar unas fotos en las que usa lencería o medias de rejilla y en las que deja ver toda su anatomía casi al desnudo.

Madonna vierte sensualidad y erotismo en su cuenta de Instagram

Polémica, transgresora y atrevida, como siempre ha sido, la cantante de Like a Virgin puso sus nalgas en exhibición mientras se arrodillaba ante una cama. En otra foto la cantante pierde la blusa por completo, mientras usa un edredón para cubrir parcialmente su deslumbrante escote, dejando al descubierto gran parte de su pecho desnudo. Otra instantánea la muestra de espaldas, debajo de la cama, con la mitad del cuerpo semidesnudo. En las fotografías más ardientes, la cantante no se despega de sus tacones más sexys con la inconfundible suela roja de Christian Louboutin.

En sus stories de Instagram compartió alguna foto con una cita de la poeta Mary Oliver: «La belleza sin propósito es belleza sin virtud, pero todas las cosas bellas tienen esta función: entusiasmar a los espectadores hacia un pensamiento sublime. Gloria al mundo, ese buen maestro».

Esta no es la primera vez que Madonna genera controversia sobre sus publicaciones. Durante el pasado fin de semana, compartió fotos de sí misma que incluía una del fotógrafo Steven Klein con un cuchillo en la garganta. En la leyenda revelaba que su personal trabajaba gratis en un proyecto reciente.

Una avalancha de comentarios la criticaron por permitir el trabajo no remunerado, mientras que otros se quedaron furiosos por su peinado trenzado, acusando a la estrella de apropiación cultural. Otros insistieron en que estaba haciendo apología de la violencia. El debate, de nuevo, lo modera Madonna.