Mamá Beyoncé
La diva presenta a sus hijos con la misma estética y de la misma forma que anunció su embarazo.
No puedo dejar la oportunidad de hablar de Beyoncé y congratularme con la presentación al mundo de sus gemelos a través de redes sociales. Las quinielas estaban abiertas en cómo iba sorprendernos y no ha defraudado. Lo ha vuelto a hacer a través de su cuenta de Instagram, @beyonce. Emulando a la diosa Venus y ataviada con una espectacular bata de volantes y estampado del flores del diseñador español Palomo Spain, Beyoncé sujeta sonriente a sus dos gemelos y celebra con la instantánea el mes de vida de Sir y Rumi.
Los presenta al mundo como los hijos de una poderosa mujer que exhibe y conjuga sin pudor su feminidad. Ella ha decidido enarbolar el embarazo y el estado de gestación no solo como una bendición sino también como un estado excepcional de empoderamiento y fertilidad. Como una Madonna rebosante de sensualidad, Beyoncé ha seguido con esta fotografía la misma estética que cuando, también en redes, anunció que estaba embarazada: celebrando la doble bendición. No quiero dejar de agradecerle el enaltecimiento a la maternidad y al embarazo como una fuente de poder y no de debilidad. Sobre esa cuestión, en la sociedad quedan muchas imágenes y estigmas que erradicar.
Todos tenemos en la mente su actuación en los Premios Grammy 2017. Casualmente, por si alguien todavía cree en las casualidades, fue su propia madre quien la presentó, Tina Konwles: «Con el orgullo de una madre, mi hija Beyoncé». Con un diseño de Peter Dundas que la bañaba en oro y silueteaba su majestuosa barriga de embarazada y portando una corona de sol dorada, Queen Bey deslumbró a todos y demostró, una vez más, que es la reina absoluta del pop, capaz de convertir la maternidad en lo que siempre ha sido, pero pocas han logrado mostrarla en ese exceso de simbolismo y riqueza.
«¿Os acordáis de cuando nacisteis? ¿estáis agradecidos? …», interpeló a la audiencia. Reconozco que aplaudí su homenaje a Mami Wata, la diosa africana del agua, de la belleza, del sexo y de la fertilidad. Reconozco que aplaudo cómo aprovecha su éxito para romper estereotipos de género, raza y sexo a pesar de la punta que muchos quieran sacar a todo ello. ¿Todo producto de una gran campaña de marketing? Reducirlo a ello sería quedarnos sin el subtexto logrado, pero tampoco podemos obviar que todo lo que toca se convierte en oro.
Según la revista Forbes, ella y su marido Jay-Z, acumulan una fortuna de 1160 millones de dólares. Todo en ellos es un producto rentable. Incluso los nombres de los niños, tal y como hicieron con su primogénita, han sido registrados como marca en el registro de la propiedad para que solo ellos puedan explotarlo. Tampoco me olvido que la fotografía de su doble embarazo rompió todos los récords de likes y acumula ya más de once millones de ¡me gusta’ ¡Una barbaridad! ¿Superará los likes la nueva? ¿Está rentabilizando todo esto Beyoncé? No lo dudo y, sinceramente no es lo que me importa sino lo que ha cosechado con ello. Tal y como dijo la periodista de The New York Times, Vanessa Friedman, Beyoncé ha logrado “un nuevo paradigma de los que significa ser una mujer embarazada”. Por todo ello y por supuesto, por su música… ¡Gracias Beyoncé!