Cuando faltan menos de dos meses para su boda, Tamara Falcó se ha quedado sin vestido de novia. O al menos, sin nadie que se lo haga. Así lo han comunicado desde la firma Sophie et Voilà con la que la socialité había firmado un contrato para elaborar el diseño de su enlace con Íñigo Onieva.
“Lamentablemente, el acuerdo entre Sophie et Voilà y la Sra. Falcó para la confección de su vestido de novia ha tenido que ser resuelto como consecuencia del incumplimiento contractual por parte de la Sra. Falcó», dice un comunicado del atelier bilbaíno.
El motivo según han dado a conocer, habría sido un posible plagio de un diseño de otro diseñador. Algo que por ética no estaban dispuestas a realizar desde la firma. «(…) Sentimos un profundo respeto por la creación artística de otros compañeros y nuestra ética empresarial nos impide traspasar ciertos límites que pondrían en peligro la autoría original del diseño. Por eso, y por el respeto que nos merece la originalidad de los trabajos de otras marcas de alta costura, no podemos cumplir con determinadas exigencias de la Sra. Falcó, que desde el inicio de la relación hemos desaconsejado y negado a realizar por acercarse demasiado a diseños ajenos a nuestra firma».
Dicen desde Sophie et Voilà que se esfuerzan «por brindar un servicio impecable» y satisfacer las necesidades de sus clientas «con la calidad, el cariño y la atención por los detalles». Además, inciden en que aprecian la confianza que depositan en ellas y trabajan «intensamente para cumplir con sus expectativas de manera excepcional». Por eso mismo agradecen la confianza depositada en la marca por parte de Tamara Falcó para confeccionar su vestido de novia y le trasladan sus mejores deseos para el día de su boda.
Ojiplática y realmente sorprendida, la marquesa de Griñón ha manifestado que es «categóricamente falso» que quisiera que copiaran un vestido. «Respeto la moda y trabajo en ella», ha dicho. Además, ha declarado a la revista Hola! que se ha enterado por la prensa de la ruptura de su relación con las diseñadoras. «No tenía ni idea y nunca pensé que llegaríamos a este punto. De hecho estábamos trabajando al menos por nuestra parte en un entendimiento».
Se refiere al diseño del vestido del que dice, nunca quiso copiar a nadie. “Una cosa es la copia y otra el trabajo con inspiraciones. Este es un proceso creativo común en todos los diseñadores que a mí misma me enseñaron en la escuela de Marangoni, donde estudié. Aprendes que un proceso creativo bebe de muchas fuentes de inspiración. Lo que yo les trasladé fueron mis inspiraciones, sin intención de que copiaron ningún diseño«, publica la revista.
A la pregunta de qué va a hacer ahora, la socialité contesta: «Tengo que empezar todo desde cero. Me da mucha pena porque lo que tenía que ser un momento super especial e ilusionante se había convertido en un conflicto lleno de momentos de tensión. Se había desvirtuado totalmente el proceso. Aún así no pensé que fuéramos a llegar hasta aquí. Así que le doy las gracias a Sophie & Voilà por todos los deseos buenos que me trasladan en su comunicado, pero me han dejado lo que se dice compuesta y sin vestido”.
El pasado mes de marzo, IQOS presentó su campaña 'IQOS Game Changers' que reconoce a… Leer más
No hace mucho tiempo, los medios internacionales se hicieron eco de que los duques de… Leer más
El mercado de la vivienda de lujo en España ha vivido una enorme expansión en… Leer más
La coronación de Carlos III fue, con permiso del funeral de Isabel II, el gran… Leer más
Tras la victoria electoral de Donald Trump, los mercados globales han reaccionado con movimientos significativos.… Leer más
Pocas imágenes de la historia del cine son tan recordadas como la de Olivia Newton-John… Leer más