Tamara Falcó recibe muy ilusionada las llaves de su nueva casa: «Es un sueño»
Tamara Falcó ya ha recibido las llaves de su nuevo y exclusivo ático de Puerta de Hierro, a escasos metros de Isabel Preysler.
A finales de 2020 Tamara Falcó se lanzó de lleno al mercado inmobiliario. La marquesa adquirió un impresionante ático de nueva construcción valorado en 1.5 millones de euros. Una exclusiva vivienda con cuatro dormitorios, tres baños y una impresionante terraza, ubicado en la zona de Puerta de Hierro, a pocos metros de Isabel Preysler. Ahora, dos años después, Tamara ya puede decir que es propietaria y ha recibido las llaves de su primera casa.
Tamara Falcó recibe las lleves de su nueva y lujosa casa
Con acabados de primera calidad, la vivienda de Tamara Falcó se encuentra dentro con una lujosa urbanización con piscina, spa, zona gourmet y amplias zonas verdes. Un espacio privilegiado en pleno centro de Madrid y que ha sido proyectado por Kronos Homes y el estudio de arquitectura A-cero.
Muy ilusionada, la hija de Isabel Preysler ha querido que las cámaras retraten el momento en el que recibía las llaves de su primera vivienda. «Es un sueño». «Estoy encantada. Tengo la suerte de tener mi propio piso, que para mí es todo un logro. Evidentemente no se puede comparar con la casa de mi madre que está aquí al lado pero bueno, es el mío», confesaba.
Se mudará a su nuevo ático junto a Íñigo Onieva
Derrochando estilo, la Marquesa de Griñón eligió para este día tan especial un dos piezas de color crema. Un conjunto de pantalón fluido y blazer cruzada con lazada a la cintura. Un diseño de lo más favorecedor y elegante que combinó con una camiseta amarilla y unas sandalias de tacón alto.
Será en las próximas semanas cuando Tamara se mude con Íñigo Onieva a su impresionante ático, abandonando así su hogar en el madrileño barrio de Las Salesas. Un coqueto y elegante piso con estancias amplias y una decoración exquisita donde el blanco y los muebles de diseño son los grandes protagonistas. Allí la pareja han afianzado su relación, que dura ya casi dos años.