La Marquesa de Griñón está en su mejor momento. La vida le sonríe en lo profesional, y en lo personal, Tamara Falcó vive un momento muy dulce junto a Íñigo Onieva. Aunque son constantes los rumores de infidelidad de él desde que comenzaran su relación, ella lo tiene clarísimo: «Pondría las dos manos en el fuego por él». Así lo comentaba ayer mismo ante los micrófonos durante la presentación de su colección de medallas religiosas en las instalaciones de la joyería Tous.
Ataviada con con unos vaqueros Levi’s, unos zapatos de Aquazzura, una americana de Blazé Milano y un bolso color limón de Matiz, la chef llegó puntual a su cita en las instalaciones y atendió muy sonriente a la prensa.
Preguntada por la vida nocturna de su novio y sus supuestas infidelidades, explicaba: «Lo tenemos asumido y lo llevamos con serenidad. No hacemos caso, ¿para qué? La verdad es que es casi un acoso, un bullying. Estamos muy seguros de cada uno». Y ante la cuestión de si le perdonaría una infidelidad a su novio nos dice: «Me gustaría no verme en esa tesitura. Yo creo que el noviazgo es algo para conocer a la otra persona. Yo creo que es distinto perdonar una infidelidad, que debe ser dolorosísima, si estás casada o con niños, que cuando estás en el noviazgo».
En este sentido, Tamara Falcó nos aclaró si le gustaría casarse con Íñigo Onieva: «Sí, evidentemente. Tanto Íñigo como yo venimos de padres divorciados y creo que eso te hace cuestionarte todo más y te hace más cauto».
No obstante, de momento su relación va viento en popa y ni siquiera sabe si en un futuro próximo habrá cambios sustanciales. Así, la diseñadora, chef e influencer nos confirmó que le entregarán su nueva casa en junio, pero que aún no tiene decidido si vivirá allí o se quedará, como ahora, en el centro de Madrid.
En otro orden de cosas, la hija de Isabel Preysler también quiso explicarnos que desde que es chef se ha aficionado a hacer rutas gastronómicas. «Es algo que me enseñó mi padre y que ahora que soy chef disfruto desde otro punto de vista. Me encanta comer y a Íñigo, también. Por cierto cuando salimos en grupo, pagamos a escote». Así, añadió que muy pronto abrirá su propio restaurante en El Rincón, la finca que perteneció a su padre y que ahora es de ella y de su hermano.
Tamara Falcó también tuvo tiempo a hablar de actualidad y se refirió con tristeza a los acontecimientos que se viven en Ucrania. «Es tristísimo. Además cuando ya hay armas nucleares de por medio, es peor. Deberíamos rezar todos». Como todos sabemos, Tamara es muy devota de la Virgen, y por eso ha querido dedicar su figura a su última colaboración con Tous.
Se trata de una colección de piezas inspirada en una Virgen que le regaló su madre. Una línea muy especial elaborada por orfebres de Tous que ha tenido una gran acogida entre el público. Tamara adelantó que ya le ha regalado a su suegra, la madre de Íñigo, una pulsera con varias imágenes de la Virgen y otra a su madre para el cuello.
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