La cesta de Navidad más deliciosa (y solidaria) es la de la Fundación Querer
No hay una Cesta de Navidad más completa en el mercado que la de Festt y la Fundación Querer con productos gourmet, solidarios y Made in Spain.
Ya estamos prácticamente en Navidad. Un tiempo para regalar, para disfrutar de planes en familia y para comer… mucho. Porque, no nos engañemos, en esta época del año nos damos más caprichos que nunca gracias a las comilonas familiares, las quedadas con amigos y las cenas de empresa. Y también descubrimos nuevos productos gourmet gracias a la cesta de Navidad de Festt y la Fundación Querer.
Un año más, y van cuatro, la entidad sin ánimo de lucro y la firma especializada en la confección y envío de cajas de regalo totalmente artesanales, colaboran en la composición de esta caja con 18 productos deliciosos y Made in Spain.
Como en las ediciones anteriores, todo los productos han sido donados por diferentes empresas españolas para apoyar el trabajo de la fundación. De esta forma, quien compre o regale esta IV Cesta de Navidad de la Fundación Querer estará haciendo también una labor solidaria.
La de apoyar a la investigación y divulgación de las enfermedades neurológicas graves así como en la educación de los niños que las padecen en nuestro país. Para comprarla (al precio de 195 euros) basta con reservarla a través de info@fundacionquerer.org. Pero veamos qué tiene.
Queso y jamón, ideales para empezar
Una buena comida comienza con un buen aperitivo. Y nada más español, más delicioso y más típico que el queso y el embutido. La Cesta de Navidad de la Fundación Querer trae una cuña de queso artesano Payoyo y una selección de embutidos ibéricos de Aljomar.
Payoyo es una firma afincada en Villaluenga del Rosario, Cádiz, que elabora sus productos de forma artesanal desde 1997. Gracias a su buen hacer atesora 175 premios, tanto nacionales como internacionales, incluida la mención máxima de tres estrellas al queso semicurado de cabra en el Great Taste Awards celebrado en Londres en 2019.
En cuanto a la firma jamonera Aljomar, está ubicada en Guijuelo, Salamanca. Tiene a sus espaldas una experiencia de 25 años y una proyección internacional imparable. De hecho, sus productos ya se comercializan en más de 30 países de todo el mundo.
Morcilla con pan
En un aperitivo no puede faltar un buen pan, como el que hacen en La Regañá Don Pelayo; ni tampoco un plato caliente con sabor Made in Spain. En este sentido la Cesta de Navidad de la Fundación Querer apuesta por el sabor de la morcilla de Burgos, un producto tradicional que logró la Indicación Geográfica Protegida en el año 2020.
En este caso la elabora Cardeña Food, una empresa vinculada desde hace cuatro generaciones a este producto y cuyos orígenes se remontan a 1925. Su morcilla está elaborada de la manera tradicional, con cebolla horcal, sin conservantes, sin gluten y sin lactosa.
Y para acompañarla, las delicias de pan de La Regañá Don Pelayo. Sus elaboraciones, tradicionales, crujientes y sabrosas no pueden faltar para acompañar aperitivos y tapas. Sus picos han sido premiados como “Producto Excelente de Andalucía” por la Sociedad Andaluza para el Estudio de Intolerancias Alimentarias (SAEIA).
Aceite en diferentes texturas
No hay duda de que el aceite de oliva forma parte de nuestro ADN y es esencia de la gastronomía mediterránea. Esta Navidad la Fundación Querer propone aliñar cualquier plato con el aceite de oliva de Castillo de Canena y las atractivas perlas de Caviaroli.
En el grupo de las empresas familiares, con experiencia y saber hacer, se encuentra también Castillo de Canena, en Jaén. Con una dilatadísima experiencia en el mundo del aceite, los hermanos Vañó siguen innovando y sorprendiendo al mercado con aceites con personalidad de las variedades picual y arbequina. Entre sus premios más destacados se encuentra el Coq D´Or en Francia.
Y para degustar aceite español en un formato más especial y decorativo, la cesta navideña cuenta un año más con las perlas de Caviaroli. Como si fueran pequeñas esferas de caviar, son ideales para adornar y crear platos especiales, originales y diferentes. Las elaboran con diferentes tipos de aceite, desde aceite de oliva virgen extra a otros aromatizados con trufa o albahaca.
Vino y café… para beber
Si el aceite de oliva es base de nuestra gastronomía, también lo es el vino. El de la cesta es de Valduero, una bodega familiar -de las primeras que se fundaron en la D.O. Ribera del Duero- que funciona desde 1984. Todos sus vinos pasan, como mínimo, por dos maderas diferentes, lo que les aporta una identidad y un carácter, únicos. Entre su portfolio destacan los vinos tintos como el Tierra Alta en Dos Maderas 2017, un vinazo espectacular para regar las comidas y cenas de esta Navidad.
Si la cesta de Navidad de la Fundación Querer es solidaria, también lo es su café. Es el de la marca D·Origen Coffee Roasters, que desde 2012 selecciona, tuesta y comercializa cafés de especialidad en su sede de El Albir, Alicante. Su objetivo es poner en valor la procedencia de sus cafés, homenajear a los caficultores y recuperar la esencia de las recetas tradicionales.
Dulces típicos de Navidad
La sobremesa no es la misma si faltan sobre el mantel los mantecados, los turrones y otras delicias artesanas que hablan de tradición y Navidad.
Las que trae la Cesta de Navidad de la Fundación Querer son los turrones de Pablo Garrigós Ibáñez, elaborados desde hace más de 20 años en Alicante con materias primas de primerísima calidad; y los ya conocidos de la casa Moscovitas de Rialto. Unas delicias de almendra marcona y chocolate obra desde hace más de un siglo, de la confitería Rialto.
Se unen este año a la selección gourmet los Mantecados El Santo, que elabora sus exquisitos dulces en Estepa, Sevilla, desde hace décadas.
Que no falte el chocolate
Y para los amantes del chocolate, dos cajas de bombones tan deliciosos como diferentes. Por un lado los de la caja roja de Lindt, cremosos y perfectos para cualquier momento y ocasión.
Y por otro lado los míticos Cofres de Bombones Trapa, elaborados siguiendo las recetas de los monjes trapenses, que comenzaron a elaborarlos en un monasterio de Venta de Baños (Palencia) en 1891.
Dos caprichos navideños
Y como la Navidad está para darse caprichos y regalar cosas bonitas, la Cesta de Navidad de la Fundación Querer también trae dos detalles irresistibles. Uno es una bolsita de chucherías Migueláñez, que elabora dulces y productos de confitería en Madrid desde 1983.
Y otro, especialmente vinculado a la Fundación Querer, es un par de calcetines Waves Socks. De algodón 100% orgánico y Made in Spain, su particularidad es que sus diseños son obra de los alumnos del Cole de Celia y Pepe, el proyecto más ambicioso de la entidad.
Son niños y jóvenes con enfermedades neurológicas graves que con esta iniciativa fomentan su creatividad y ganan autonomía. Unos complementos unisex perfectos para todo el año que, además, han ganado el Premio Nacional de Moda.