El apogeo de las ‘branded residences’: un negocio en expansión al calor del lujo
Las 'branded residences', complejos residenciales en la mayoría de los casos gestionados por operadores hoteleros internacionales, aumentarán en un 55% hasta 2026
Vivir con las comodidades y el lujo de un hotel de cinco estrellas con las ventajas de una vivienda tradicional. Ese es el concepto del que parten las ‘branded residences’, complejos residenciales que en su mayoría están gestionados por grandes cadenas hoteleras y que se han convertido en uno de los negocios en expansión.
Así lo ha determinado el informe Global Branded Residences Report 2023 elaborado por Knight Frank. Un pliego que confirma que las ‘branded residences’ se están configurando como un mercado en crecimiento sostenido a nivel global. Además, destaca que este tipo de productos inmobiliarios aumentarán en un 55% hasta 2026.
El concepto no es nuevo, sino que existen desde 1927, cuando el hotel Sherry-Netherland abrió sus puertas en Nueva York, pero no despegaron realmente hasta los años ochenta. Ahora se han convertido en un activo en expansión gracias al auge del lujo.
Causas de la expansión de las ‘branded residences’
En concreto, gracias al aumento de la riqueza mundial muchos inversores han puesto el foco en la compra de este tipo de residencias. Y es que además de poder disfrutarlas, ofrecen la posibilidad de sacarles un mayor rendimiento alquilándolas cuando no están ocupadas.
Además, este aumento de la riqueza irá seguirá al alza. Según la consultora, la población mundial con un patrimonio por encima de los 30 millones de dólares aumentará un 28,5% entre 2022 y 2027.
EE.UU. y China contribuirán a la creación de riqueza en el mundo, con un crecimiento del 30% y el 27% respectivamente. Otros países, como Canadá, Australia, India, Alemania y Reino Unido también registrarán un alza sustancial del número de multimillonarios de aquí a 2027. Algo que seguirá dando oxígeno a un negocio creciente.
Repunte de las ventas inmobiliarias de alta gama
También, el repunte de las ventas mundiales de propiedades ‘prime’ y ‘super prime’ han favorecido el negocio. De hecho han situado a EE.UU., Reino Unido, Australia, España y Francia como destinos clave para la adquisición de una segunda residencia.
Además, a recuperación de los viajes de larga distancia de los últimos años favorece este tipo de inversiones. Igualmente, es una tendencia al alza pues se prevé que los viajes mundiales aumenten de forma sostenida un 31% por encima de los niveles pre-pandemia de aquí a 2027. Todo con un crecimiento significativo en África, Oriente Medio y Asia.
De esta forma, se ha ido creando el caldo de cultivo perfecto para que este negocio poco a poco vaya expandiéndose a nivel internacional y en también en España. La oferta hotelera de lujo ha crecido por todo el territorio español, especialmente en Madrid, Mallorca y Málaga. En estos destinos llegan cada vez más marcas de lujo internacionales, muchas de ellas con proyectos ‘branded residences’ ya proyectados en otras partes del mundo.
Más de 300 proyectos por todo el mundo
Así, la evaluación del mercado realizada por Knight Frank abarca 324 proyectos con más de 26.000 unidades residenciales en 52 países. Dicho informe, que también hace un seguimiento de las carteras de 15 operadores líderes en branded residences, identifica 186 proyectos activos en todo el mundo.
A ellos se sumarán 32 más este año; 23 en 2024; 26 en 2025; y 22 en 2026. Además, identifica otros 35 proyectos que están en proceso de diseño sin fecha de lanzamiento confirmada.
Norteamérica representa casi el 40% de todos los proyectos, seguida por Asia-Pacífico (20%) y Europa (13%). Todos ellos se ubican en 52 países, dominados por EE.UU. (106 proyectos) y México, Emiratos Árabes, Tailandia, Reino Unido y China, todos con cifras de crecimiento de dos dígitos.
Además, este crecimiento está auspiciado por grandes marcas, ya que Ritz-Carlton encabeza la lista con el mayor número de proyectos, seguida por Four Seasons, aunque en cuanto al ritmo de crecimiento, Aman y Six Senses se sitúan a la cabeza, con un 68% y un 67%, respectivamente, de su cartera total en fase de desarrollo.