La biblioteca (presidencial) de Obama

Barack Obama ha presentado su futura biblioteca presidencial, un moderno centro que se ubicará en un histórico parque de Chicago.

¿Qué tienen en común Franklin D. Roosevelt, John F. Kennedy, Ronald Reagan o George W. Bush, además (claro) de haber sido presidentes de Norteamérica? Pues muy fácil, todos tienen ya su biblioteca presidencial, como marca la tradición del país, iniciada por Roosevelt en los años treinta. Este mes de mayo el popularísimo expresidente Obama ha presentado la que llevará su apellido y, con suerte, su filosofía de vida.

El expresiedente Obama, presenta su proyecto

El Centro Presidencial de Obama (otra forma de llamarlo) se ubicará en el parque Jackson, en el sur de Chicago, donde cursó los estudios de joven el político, y se prevé que abrirá en el año 2.021. Además, será la primera Biblioteca Presidencial (actualmente hay catorce) que se construirá en el centro de un entorno urbano, formando parte de su pulmón, a juzgar por las infografías y maquetas que han preparado del futuro elemento urbanístico.

Ubicación de la biblioteca presidencial de Obama

La actuación tendrá dos elementos clave, un museo que conformará la estructura más alta, y que servirá (según la Fundación Obama) como linterna del centro presidencial, así como entrada para el visitante; y dos edificios de una planta, la biblioteca y el foro, que se fundirán con el entorno mediante zonas ajardinadas en su cubierta, así como accesos exteriores.

Así será la biblioteca de Obama, entre jardines

Se espera que el proyecto consiga el certificado LEED V4 platino otorgado por el USGBC (U.S. Green Building Council), que reconoce el máximo esfuerzo en el uso adecuado del agua, de la eficiencia energética y de la capacidad de reducir las emisiones de gases efecto invernadero. La superficie total final rondará los 21.000 metros cuadrados y para alcanzarlos se reconfigurará el parque actual, aumentando el espacio verde del histórico lugar.

Detalles de la estructura de la bibliteca

Otra de las novedades que tendrá el centro será que todos los documentos que albergue el edificio serán digitalizados, incluso los registros de la administración Obama catalogados como “no clasificados”, ayudando a la entidad NARA (Archivos y Registros Nacionales) que es la encargada del control continuo sobre los registros presidenciales, también se fomentará el fácil acceso de estos documentos al público en general y a historiadores y estudiosos en particular.

Edificio principal de la biblioteca presidencial

El centro costará 500 millones de dólares (447 de euros) y ha sido diseñado entre los estudios de arquitectura Tod Williams Billie Tsien (una pareja bien avenida, de Nueva York) e Interactive Design Architects, con base en Chicago. Este centro será capaz de atraer entre 600.000 y 700.000 visitantes al año, creando nuevos puestos de trabajo y revitalizando la zona, según un comunicado de la Fundación, se cree que la cifra alcanzará los 4.945 empleos directos e indirectos durante su construcción y, después, unos 2.536 cuando se abra al público.

El museo tendrá forma trapezoidal con una parte inferior en disminución y una superior en aumento. Se han recortado dos de sus esquinas opuestas dándole una forma característica. Además, estos cortes proporcionarán luz y ventilación naturales a varias de sus estancias interiores.

Fachada del museo, en la maqueta

Las fachadas estarán recubiertas por plaquetas de piedra natural, material que contribuirá a su integración con el medio que rodea al edifico. Según sus promotores el centro está diseñado para devolver al parque Jackson su papel de “parque del pueblo” y que puedan disfrutar de él, tanto los residentes locales, como los visitantes. Apoyando este concepto, el proyecto prevé un pequeño lago artificial, una zona para trineos, un parque infantil, abundante césped al aire libre y serpenteantes caminos para viandantes. Además, con el tiempo se construirá un centro de atletismo en la parte opuesta a la Biblioteca.

Maqueta general del espacio presentado por Obama

Desde la Fundación Obama insisten en que el centro presidencial será un lugar donde dar forma (entre todos) a lo que significa ser un buen ciudadano en el siglo veintiuno. Por mi parte, entiendo que todo proyecto arquitectónico debe tener un fin antes de su concepción, éste lo tiene, sólo falta ver si se llevará acabo tal como fue diseñado o se irá transformando con el tiempo… Por cierto, sé que todavía no lleva un año en el cargo pero… ¿Os imagináis ya la futura Biblioteca Presidencial de Donald Trump?

Subir arriba

Este sitio utiliza cookies para prestar sus servicios y analizar su tráfico. Las cookies utilizadas para el funcionamiento esencial de este sitio ya se han establecido.

MÁS INFORMACIÓN.

ACEPTAR
Aviso de cookies
Versión Escritorio