Abierta la convocatoria de Arte para la Mejora Social 2015

La convocatoria de Arte para la Mejora Social concede ayudas a proyectos culturas de cualquier disciplina artística liderados por artistas que ponen sus herramientas de trabajo en manos de personas con discapacidad o en riesgo de exclusión social. Los proyectos presentados deben tener el objetivo de acercar a las personas participantes a la cultura a través de una actividad artística que contribuya a su desarrollo personal, ponga en valor y potencie las propias capacidades, y fomente la inclusión social.

Para ello, la Obra Social ”la Caixa” impulsa la convocatoria de Arte para la Mejora Social 2015, que permanecerá abierta hasta el 29 de mayo.

El presidente de la Fundación Bancaria ”la Caixa”, Isidro Fainé, ha destacado la firme apuesta de la entidad por convertir «el proceso creativo en una herramienta efectiva en el emponderamiento de personas en situación de vulnerabilidad». Las iniciativas deben priorizar especialmente la intervención de los participantes en el proceso creativo de la actividad y solo pueden ser presentadas por equipamientos y entidades culturales o artistas. Las entidades de carácter social no pueden presentar proyectos a esta convocatoria, pero sí a las que ofrece la Obra Social ”la Caixa” a través del Programa de Ayudas a Iniciativas Sociales.

El programa de Arte para la Mejora Social pone en relación sus objetivos con los principales beneficios que puede aportar la participación en actividades artísticas tanto a nivel individual como colectivo. Personalmente, puede producir cambios en aspectos como la confianza en uno mismo, las habilidades o aptitudes y el desarrollo de la persona.

Estos beneficios individuales pueden contribuir a un mayor cambio social: a través del refuerzo de la confianza, especialmente de grupos minoritarios o en situación de vulnerabilidad, el fomento de la comunicación y la contribución a la cohesión social. De la misma forma, la participación en proyectos artísticos puede propiciar la relación entre las personas y el entorno, ofrecer espacios neutrales de relación, intercambio y convivencia, y mejorar las capacidades organizativas y de cooperación de una comunidad o un grupo social. (Fotografías: «la Caixa»).