Un nuevo parque que cura en el Gregorio Marañón

La Fundación Juegaterapia, que ayuda a los niños enfermos de cáncer a través del juego, ha anunciado que construirá su IV Jardín De Mi Hospi en la cubierta del Hospital Materno Infantil del Gregorio Marañón. El arquitecto Rafael Moneo, autor del diseño del hospital construido en el año 2003, ha querido apadrinarlo y será realizado de forma solidaria por los arquitectos Paco Padilla y Juanma Nicás del estudio de arquitectura Padilla Nicás, quienes contarán con la ayuda y colaboración del Premio Pritzker y Príncipe de Asturias de las Artes.

“Sabemos que este jardín le va a cambiar la vida a muchos niños porque lo vivimos a diario con los que ya están disfrutando desde 2013 en los otros dos que hemos construido en La Paz y el 12 de Octubre”, ha afirmado Mónica Esteban, presidenta y fundadora de Juegaterapia. Y añade: “Este año inauguraremos también el de La Fe en Valencia y seguro que en muy poquito tiempo abriremos las puertas de éste para que a nuestros pequeños les dé el aire en la cara mientras juegan con sus familiares y se curan mucho más rápido. Seguro que volvemos a contar con el apoyo de empresas y, sobre todo, de miles de personas que quieren colaborar y ser parte de estos maravillosos jardines”.

Es una idea original de Juegaterapia que consiste en transformar las cubiertas de los hospitales en zonas de juego y relax al aire libre. Los niños pueden seguir recibiendo sus tratamientos mientras juegan en los jardines con sus familiares como cualquier niño. Poder salir a jugar al exterior, según algunos padres, les devuelve a su vida normal, como todos los pequeños que van al parque cada día. Todos los jardines se han hecho gracias al apoyo y la colaboración de muchas empresas, instituciones y miles de particulares que quieren ser parte de ellos y colaboran poniendo su semilla en los jardines a través del envío de sms al 28011.

La Fundación presenta junto con el proyecto, un vídeo con imágenes de los niños jugando, haciendo sus peticiones concretas a los arquitectos y declaraciones de los padres y personal de enfermería que pone de manifiesto la importancia de estos jardines ya que “un niño triste, que pasa semanas y meses sin salir de su habitación es mucho más difícil sacarlo adelante”.

El Jardín de mi Hospi del Gregorio Marañón es el Jardín de las Nubes
Los arquitectos del estudio Padilla Nicás quieren que los niños ingresados en el Gregorio Marañón puedan jugar entre nubes cuando salgan a su jardín… pero a su manera. Plantean unos espacios coloridos con formas amables sobre los que se sitúan unas estructuras de elementos tubulares que darán sombra y cobijo, y que combinadas con los elementos del suelo permiten el juego de los niños.

Se han elegido tres zonas dentro de la cubierta del edificio que se dividen en espacios de juego por edades. También habrá una zona para manualidades, otra para ejercicios y un área de familias para descansar y relajarse. Incorporará elementos divertidos de juego para los niños como columpios y toboganes, muchos de ellos colgados de las propias nubes, así como un laberinto y hasta espejos en el suelo para ver cómo cambian con la luz las formas y sombras de las nubes.

Hospital Gregorio Marañón: Calidad asistencial
El Hospital Infantil Gregorio Marañón atiende cada año una media 8.000 niños en sus áreas de hospitalización. Además, se realizan más de 3.600 intervenciones quirúrgicas y más de 100.000 consultas amenores. Asimismo, en los hospitales de día infantiles de Nefrología, Oncología y Médico el año pasado se administraron 8.613 tratamientos. Junto al Hospital de Día Quirúrgico, el Hospital Infantil Gregorio Marañón cuenta con cuatro quirófanos para intervenciones programadas y uno más para urgencias, además de una sala de Hemodinámica tanto de diagnóstico como terapéutica.

En su afán de humanizar la asistencia sanitaria, desde 2008 existe un Comité de Humanización que sólo en el Hospital Infantil colabora con 14 entidades sin ánimo de lucro. El Marañón también tiene una escuela dentro de sus instalaciones, dos salas de juegos y una ciberaula, y es un hospitalabierto 24 horas para que los padres puedan estar con sus hijos todo el día.

Sobre Juegaterapia
La Fundación Juegaterapia ayuda a los niños enfermos de cáncer a través del juego. Recoge videoconsolas que la gente ya no usa y las reparte por las habitaciones de oncología pediátrica de todos los hospitales españoles para que los pequeños pasen sus ciclos de quimio jugando y se olviden de su enfermedad. En España ya ha entregado consolas en 76 hospitales y también fuera en centros hospitalarios de Portugal, Marruecos, El Salvador, Afganistán, India, Guinea y Guatemala.