La cama de 80.000 euros
Corazón británico, pero con sangre española: así es el descanso de lujo y el más elitista del mercado.
Nos hemos tumbado en la cama más lujosa del mercado, con un precio de 80.000 euros, y os confesamos que nunca nos hubiéramos vuelto a levantar. En El Corte Inglés de Castellana, en Madrid, Vispring tiene un espacio reservado para soñar. La versión moderna de la famosa caverna en la que los siete durmientes de Éfeso buscaron refugio huyendo de la persecución del emperador Decio. Noventa y seis años después, fueron encontrados en un profundo sueño. De ahí surge el refrán español: “Duermes más que los siete durmientes”. Tras la experiencia, puedo decir que hubiera protagonizado en primera persona esta leyenda mitológica. Que no os quepa ninguna duda.
¿Cómo se debe dormir en una cama de 80.000 euros? Esta pregunta rondaba mi cabeza días atrás antes de mi cita con Jesús Sánchez, National Account Manager de Vispring en España y Portugal. Realmente ¿existe una cama tan lujosa y con este precio? La respuesta es afirmativa. Y lo más sorprendente: Vispring es una marca con corazón británico pero sangre española.
Tenemos que viajar hasta 2005 cuando el grupo español Flex, uno de los grandes fabricantes mundiales de equipos de descanso, incorporó Vispring a su oferta comercial. Una decisión estratégica para, en palabras de Sánchez, “liderar el sector de las camas de lujo a nivel mundial”. Esta decisión, que tras una década se ha tornado acertada, supuso tomar las riendas de una marca que fabricaba sus colchones de forma artesanal y con materiales 100% naturales.
“Tras su adquisición por Flex, la marca ha continuado con el mismo proceso de fabricación artesanal y bajo pedido. No usamos látex ni ningún material derivado del petróleo, solamente componentes naturales”. ¿Y cuáles son esos elementos naturales que tanto subraya Sánchez a lo largo de la entrevista? Pues, ni más ni menos que lana, pelo de cola de caballo, vicuña, seda y cachemir, por citar solamente algunos de los más notables.
Todo un proceso de fabricación artesanal que es un espectáculo y que ocurre en una pequeña ciudad del suroeste de Inglaterra, Plymouth, que cuenta con el único centro de producción de Vispring. “Plymouth abastece a todo el mundo, especialmente a los mercados con mayor demanda que son los Estados Unidos, Rusia, China y algunos países de África” afirma Sánchez.
Vispring cruzó el canal de la Mancha en 2008, cuando Flex decidió traer su marca ‘premium’ al mercado español. A pesar de los malos augurios por la crisis económica, Vispring se ha consolidado y cuenta con 21 distribuidores, entre ellos El Corte Inglés. “Seleccionamos muy bien los canales de distribución porque debemos ofrecer nuestro producto en espacios comerciales con el mismo nivel de prestigio que nuestro producto, para llegar a nuestro público afín”. Harrods, como no podía ser de otro modo, es la cuenta número uno para Vispring en suelo británico.
Sánchez repite especialmente las siguientes palabras mientras charlamos de forma distendida: fabricación artesanal, lujo y materiales naturales. Y ello es así porque todas las camas de Vispring, desde la más ‘asequible’ por 4.500 euros hasta la más lujosa por cerca de 80.000 son pura artesanía. “Tenemos a un equipo de profesionales artesanos que primero producen la estructura de muelles e incorporan los distintos materiales naturales seleccionados. Finalizamos con un artesano que cose todo el perímetro del colchón a mano, con hasta 6 puntadas en el caso de las camas más lujosas. Puede tardar hasta dos días completos en terminar esta labor”, asegura Sánchez mientras yo escucho asombrado.
Cuentan en su haber con hasta 16 modelos de camas distintas. A los que debemos sumar los divanes, almohadas y ‘toppers’, entre otros productos. Inevitablemente, lanzo una pregunta curiosa. ¿Cómo está confeccionada la cama superlativa de 80.000 euros? “Tiene 2×2 metros y tres filas de muelles embolsadas en el colchón, así como 2 filas de muelles en el diván. Cuenta con lana, algodón, pelo de cola de caballo, alpaca, cachemir y telares de seda dorados. Parece que duermes en una nube”. Más bien diría que esta cama cumple con el refrán “Dormir como un lirón”. Si le añades un ‘topper’ de colchón, la experiencia debe ser escandalosa.
Tras casi una década en España, Vispring conoce perfectamente los gustos patrios de los españoles en materia de descanso. “Bastante diferencia con el resto de países. Aquí siempre se opta por la firmeza más dura. Somos aún de la cultura de colchón duro y firme, al contrario que en Gran Bretaña. Nuestro top ventas es una cama de 7.000 euros confeccionada con lana, algodón y pelo de cola de caballo”, afirma Sánchez relatando su experiencia con el consumidor español. “Tiene una edad media de 45 años y está interesado en realizar una inversión en descanso y salud. Nuestra cama dura 25 años de forma certificada, hecho diferencial que valora nuestro cliente”.
Ciertamente, como reza una escultura dedicada a la cama en Columbia (Estados Unidos), nacemos, morimos y nos pasamos un tercio de nuestra vida en una cama. A buen entendedor, pocas palabras bastan. “Una inversión decente en una cama que cuenta con una duración de 25 años es una decisión muy razonable”, asegura Sánchez mientras asiento con la cabeza. Le pido permiso para tumbarme en la cama más lujosa del mercado. La excusa, grabar el siguiente vídeo que podéis disfrutar en esta noticia. No he podido resistirme, pero ¿quién no desearía que se le pegaran las sábanas por la mañana en esta cama?
