El tiempo vuela. Hace 5 años que EE.UU. echó el freno a uno de los grandes nombres de la industria de la tecnología: Huawei. Lejos de darse por vencida, la firma asiática ha resurgido como el ave fénix y no solo ha demostrado que existe vida más allá de la tecnología americana, sino que es posible crear un nuevo ecosistema de productos y servicios bajo su insignia.
Su lanzamiento más reciente es este portátil que trata de competir con el popular MacBook de Apple con un precio más atractivo. Para ello, apuestan fuertemente por el diseño y la pantalla que juntos redondean una satisfactoria experiencia con Windows y múltiples toques del ecosistema propio de la marca.
El nuevo MateBook 14 de Huawei es un portátil de última generación para profesionales, estudiantes o usuarios cotidianos que buscan portabilidad y soltura para las tareas ofimáticas del día a día. Aquí te cuento mi prueba en profundidad.
Para quienes nos hemos criado con la tecnología bajo el brazo, el nivel de exigencia en el diseño de los dispositivos es cada vez mayor. Este nuevo laptop de Huawei combina inteligentes elementos para hacerlo atractivo sin grandes ostentaciones. Es muy delgado y ligero, perfecto para meter en la mochila y llevarlo encima todo el día. En el exterior, la carcasa de aluminio pulido sienta realmente bien a la vista y al tacto; y su sutil tinte verdoso le da un toque fresco y brillante. Es curioso, porque bajo la luz natural, parece más bien plateado.
El redondeo a la experiencia se lo dan la combinación interior cuando abrimos la tapa. La pantalla, uno de los grandes atributos de este portátil que merece su propio apartado más adelante, atrapa la atención. Su diseño sin marcos ni recorte para la cámara es sublime. El teclado tampoco cuenta con marcos ni rebajes, el recorrido de las teclas es bueno y firme, lo que hace que la sensación de escribir sea bastante satisfactoria. En la parte superior se coloca el botón de encendido que además integra un lector de huellas dactilares, y abajo un trackpad que si bien es funcional, no llega a ser todo lo natural y preciso que me hubiese gustado.
¡Wow! Esa fue mi reacción al ver por primera vez la pantalla de este MateBook 14, que quizá sea su principal punto diferencial. Traída de productos de precio y gama más altos, el panel que integra este portátil es puro espectáculo. Tiene pantalla táctil con tecnología OLED de 2,8K de resolución con 120Hz de tasa de refresco. Si todo esto te suena extraño, déjame decirte que está a la altura de lo más top del mercado.
Este portátil es cómodo de utilizar en interiores, exteriores, cafeterías, trenes… lo he probado en muchas circunstancias y el brillo rinde estupendamente bien. El ojo más fino rápido se da cuenta de que es capaz de mostrar imágenes nítidas y muy coloridas, con un contraste entre tonos negros y vivos bastante profundo. La culpa de esto la tiene la tecnología OLED, cuya inclusión siempre es de agradecer. En reglas generales, la pantalla se ve fenomenal para navegar por Internet, trabajar en documentos, ver pelis o series, etc.
Breve mención a dos aspectos curiosos. En primer lugar, el formato elegido (3:2) es perfecto para trabajar con varias ventanas abiertas simultáneamente. Por otro lado, que la pantalla sea táctil abre la puerta a hacer acciones breves con los dedos o, en un momento determinado, hacer anotaciones con el lápiz de Huawei. No es muy cómodo, pero está ahí como función añadida.
Otro punto muy relevante es el rendimiento para abrir y trabajar con diferentes aplicaciones. El MateBook de Huawei apuesta por chips de última generación de Intel que funcionan de la mano de un software propio de la marca llamado Super Turbo, que actúa para optimizar el rendimiento y optimizar el consumo. El uso de chips de Intel le exige a Huawei mantener un sistema de ventiladores bajo el chasis de aluminio, que son muy silenciosos y apenas molestan. El calor aparece tras un rato de uso moderado, pero no afecta al rendimiento en las tareas más comunes. Eso sí, este no es un equipo para editar vídeos o hacer grafismos a nivel profesional.
En reglas generales, el portátil se enciende en pocos segundos, es ágil y rápido para la mayoría de las tareas. He trabajado con todas las apps de Microsoft 365, como Word, PowerPoint, Outlook, etc. y no he tenido problema alguno. Tampoco navegando en Internet o haciendo pequeños trabajos gráficos con Canva. El consumo de batería quizá sea uno de sus puntos más débiles y el trabajo pendiente de los chips de Intel, pues apenas aguanta unas 5/6 horas de trabajo ofimático sin necesidad de pasar por el cable.
Windows 11 es la base de este equipo, con todos sus puntos fuertes y débiles. Aquellos que trabajen dentro del ecosistema de Microsoft lo agradecerán. Huawei ha hecho lo propio añadiendo sus aplicaciones que mejoran la conectividad y experiencia con sus smartphones, tabletas, auriculares, pantallas, etc. al más puro estilo Apple. Y su apuesta por la inteligencia artificial gira alrededor de mejorar las videollamadas optimizando la cámara y micrófonos integrados.
Hay miles de usuarios que prefieren un equipo Windows para casa o el trabajo, y este portátil de Huawei es una sorpresa positiva en muchos aspectos para todos ellos. Aúna un gran diseño, una espectacular pantalla y un rendimiento más que suficiente para las tareas del día a día.
Todo por un precio que arranca en 1099€ en una estupenda configuración de 16GB de memoria y 512GB de almacenamiento. En definitiva, se erige como una solvente alternativa a lo que llega desde el mundo de la manzana mordida.
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