El baño del diablo
Nueva Zelanda esconde una de las zonas volcánicas más impactantes del mundo y secretos de belleza que salen de las profundidades.
Ya os he contado algunos destinos interesantes en Oceaníacomo el lago Hillier o la ‘playa-spa’ en Australia. Hoy os propongo ‘Devil’s bath’ (‘el baño del diablo’), en Nueva Zelanda. Un país con una orografía marcada por los terremotos, la actividad volcánica y las áreas geotérmicas. Todo ello debido a la presencia de placas tectónicas que generan diferentes formaciones geológicas en las islas del sur y norte.
Rotorua podría ser un lugar cualquiera de no ser por su peculiar olor, intenso y lleno de matices provocado por la constante actividad geotérmica.Wai-O-Tapu, que en mahorí significa aguas sagradas, es otra maravilla del hemisferio sur. Está en la isla norte de Nueva Zelanda, a poco más de tres horas de Auckland y Hot Water Beach (la ‘playa-spa’ que os presenté la semana pasada).
‘El baño del diablo’en Wai-O-Tapu es la zona volcánica más increíble que puedas ver en la ‘tierra kiwi’. Algunos lo describen como surrealista y otros como indescriptible. Lo cierto es que es cuanto menos, peculiar. Hay tres puntos de interés turístico que no deben pasar desapercibidos en tu viaje a la isla norte y en concreto, en Rotorua, donde se encuentra Wai-O-Tapu:
- El área geotermal: está en una zona volcánica activa y es considerada como agua sagrada para las tribus mahoríes. Además, el suelo presenta algunas particularidades, de apariencia ondulada, que hacen que personas con movilidad reducida tengan dificultades para moverse. Es una zona virgen en su mayoría y los paseos duran entre 35 y 75 minutos. Pero la clave está debajo de la superficie, bajo tierra, donde se encuentra un sistema de corrientes que se calienta constantemente por los restos volcánicos de antiguas erupciones. Estas corrientes calientan el agua, que absorbe los minerales hasta que sale a la superficie en forma de vapor, visible a simple vista. La reacción química resultante se llama ‘sulfuro de hidrógeno’, que es lo que provoca el olor que mencioné antes. Dependiendo de la cantidad de minerales, el agua cambiará de color. Así, se volverá blanca si la mayor parte de minerales son sílice; morado si es óxido de magnesio; naranja si es de antimonio; verde/amarillo si es sulfuro o sales ferrosas y marrón/rojo si predomina el oxido de hierro.
- El géiser Lady Knox: a las 10.15 de la mañana cada día se hace una presentación al público sobre este fenómeno y la historia que le precede. El géiser alcanza una altura de hasta 20 metros.
- La piscina de barro:Su visita a Wai-O-Tapu no estaría completa sin conocer la llamada piscina de barro. Allí se ubicada un volcán de barro gigante que fue destruido por la erosión en la década de los años 20 del siglo pasado. El barro aún hierve como consecuencia de la actividad del subsuelo.
Puedes aprovechar la tu estancia al norte de Nueva Zelanda y visitar elQE Health and Spa en Rotorua, donde usan el barro termal con asombrosos beneficios: alivio muscular, dolor reumático y artritis, hidratación de la piel y rejuvenecimiento facial, entre otros usos terapéuticos.
Ahora ya tienes un destino más para conocer, además de la oportunidad de dejarte asombrar por lo que la naturaleza todavía es capaz de ofrecernos. Una vez más, Oceanía como destino de vacaciones para añadir a tu ‘checklist’.