Hay vida más allá del Sushi
Sandra Segimón y sus socios Natacha Apolinario y José Manuel Segimón no se conforman con el éxito obtenido y su visión de futuro les ha llevado a inaugurar dos restaurantes de alta calidad para profundizar ahora en un concepto de negocio más ecológico.
En la última década del siglo XX comienza en España el auge de la cocina japonesa. Mientras tanto, Sandra Segimón y yo comenzamos una amistad de esas que duran y duran. Recuerdo cuando una noche me contó su idea empresarial. El sushi dejaría de ser algo exclusivo y apto para grandes bolsillos. Toda una visionaria en un mundo empresarial desconocido. Fundó Sushita y al poco sus bandejas de sushi preparado ya ocupaban las estanterías de grandes centros comerciales y de locales del ready to eat.
Dieciséis años después tiene unas ventas netas de más de 5 millones de euros, creciendo cada año a un ritmo vertiginoso, y se ha convertido en todo un referente en España de la cocina oriental. Para2016 tienen previsto crecer un 39% y superar los 7 millones de euros.
Sandra Segimón y sus socios Natacha Apolinario y José Manuel Segimónno se conforman con el éxito obtenido y su visión de futuro les ha llevado a inaugurar dos restaurantes de alta calidad para profundizar ahora en un concepto de negocio más ecológico. Sus nuevas recetas están elaboradas con materias primas eco pero llenas de sabor sin olvidar el color y la perfecta presentación.
Sushita no tiene rival y produce cada día 6.000 bandejastanto de sushi variado como de woks y dim sum, siempre acompañados de diferentes salsas. Así consiguen que el producto envasado llegue fresco a las 900 tiendas y puntos de venta que tienen repartidos por toda España. Por si fuera poco, Sushita está presente en varias cadenas hoteleras como Melià, NH, Eurostars y Barceló. Y también podemos incluir sus deliciosas bandejas en nuestra lista de la compra ya que están presentes en muchos supermercados gourmetcomo Sánchez Romero o El Corte Inglés. Y ofrecen un cuidado servicio de catering para que podamos sorprender a nuestros invitados.
El año 2016 les espera conun nuevo local en la calle Miguel Ángelque sin duda se convertirá en el buque insignia de la casa, el sushi congelado de máxima calidad y productos de alta gastronomía pero enfocados a cuidar la salud, sin olvidar la filosofía con la nació Sushita: «Máxima calidad a buen precio, porque somos lo que comemos».
Almuerzo con Sandra en uno de sus nuevos restaurantes, Sushita Café en Alberto Aguilera 52 y me pone al día de todos sus avances. Cuentan con una fábrica de 3.000 m2 donde trabajan 125 personas que, de manera artesanal, siguen todo el ritual de la elaboración del sushi para que sus platos sean auténticos platos de la cocina tradicional nipona. Su éxito me hace muy feliz, España ha pasado una época oscura pero Sandra y su equipo no han parado de luchar. “Hay vida más allá del sushi”, bromea. E insiste, “quiero que nuestros clientes puedan viajar al país del Sol Naciente a través del paladar”.
Y mientras tomo un exquisito y jamás antes probado Black Cod (bacalao negro) con salsa misoyaki doy fé de mi propio viaje nipón. No faltaron los sushis y nigiris, el de pez mantequilla con trufa o un sencillo sushi de salmón, bocados tan delicados como sanos y sabrosos. Detallista, exigente y perfeccionista, Sandra Segimón me asegura que el arroz orgánico que utilizan tiene certificado de origen, que el salmón procede de la pesca sostenible y que las verduras vienen de las mejores huertas nacionales. Es la única manera de conseguir sabores puros y frescos. Pruebo también el Pad Thai vegetal con tofu, pero me quedo con ganas de más y prometo volver.
En El Rincón de Carla me gusta dar a conocer historias y empresas que merecen la pena. Historias de personas excepcionales que cada día ponen su grano de arena para intentar cambiar el mundo y avanzar buscando y ofreciendo la excelencia. Sandra es un buen ejemplo y me fascina la idea de haber compartido con ella tantos momentos en la loca adolescencia y juventud y comprobar que aquel carácter divertido, espontáneo e inquieto continúa intacto pero con él ha sido capaz de convertir su visionaria idea en todo un imperio gastronómico.